SOCIEDAD
Las playas y el Sur prometen una ocupación record para el verano
En la Costa Atlántica se prevé un 90 por ciento de las plazas ocupadas, pese al aumento en los alquileres. También esperan una importante presencia de extranjeros, sobre todo en el sur.
A menos de un mes del comienzo de la temporada estival, los operadores turísticos se refriegan las manos. Tras el último verano signado por la crisis y varios años previos de un dólar barato que invitaba a ir al exterior, ahora todos anticipan un boom del turismo interno como en los viejos buenos tiempos. Las estrellas serán la Costa Atlántica y la Patagonia. Muchos extranjeros visitarán el sur, previo paso por Buenos Aires, mientras que la mayoría de los argentinos no cruzará las fronteras y buscará las costas. Por esto y a pesar del aumento promedio de entre un 20 y un 30 por ciento en los alquileres, se espera que cerca de diez millones de personas visiten las playas bonaerenses, lo que equivale a una ocupación superior al 90 por ciento.
Según las perspectivas de la Secretaría de Turismo y Deporte de la Nación, desde mediados de noviembre las reservas efectivas en la Patagonia y la Costa Atlántica superan el 70 por ciento. Mientras que las perspectivas para la costa bonaerense se basan en la imposibilidad económica de gran parte de los argentinos de salir del país, el territorio patagónico espera, como en cada temporada, atraer a los turistas extranjeros. La diferencia esta vez la marcará, según informó el ente de promoción turística de Bariloche (Emprotur), la visita de miles de chilenos que cruzarán la cordillera atraídos por el cambio favorable.
Además, otro de los objetivos es lograr que con precios más bajos los turistas extranjeros que visiten la Patagonia se hospeden más acá de la cordillera de Los Andes. Mientras duró la convertibilidad y la Argentina fue un destino caro, muchos visitantes se instalaban en Chile y desde allí, muchas veces con la contratación de excursiones chilenas, cruzaban al territorio argentino para conocer lugares determinados.
A pesar de que el turismo internacional será fundamental para la próxima temporada patagónica, excepto la hotelería de cinco estrellas o los productos exclusivamente preparados para los extranjeros, “la mayoría de las tarifas gastronómicas y de alojamiento mantuvieron los valores en pesos vigentes en la temporada anterior”, aseguraron en el Emprotur.
En cuanto a la costa bonaerense, las perspectivas para la temporada de verano son buenas en lo que se refiere a ocupación, en su mayoría de argentinos, y esto a pesar de que tanto las tarifas hoteleras como los alquileres aumentaron entre un 20 y un 30 por ciento en pesos con respecto al año pasado. Carlos Patrani, presidente del Ente de promoción Turística de Mar del Plata (Emtur), explicó que “un gran indicador de cómo se espera que sea el 2003 son los preparativos para la temporada teatral, que este año comenzaron con una gran anticipación y con una variedad que supera ampliamente la del verano anterior”.
En tanto, el presidente del Consorcio de Municipios Turísticos de Buenos Aires (Cotab), Jorge Ziampris, señaló que el cierre efectivo de operaciones es aún gradual, pero las consultas vía mail y telefónicas a inmobiliarias y entes turísticos superan con creces a las recibidas durante la temporada anterior. Por esto, se espera que la costa bonaerense reciba más de 10 millones de personas durante los tres meses, una cifra que se repite en cada buena temporada y que significa una ocupación superior al 90 por ciento de la capacidad de alojamiento de este destino. Las perspectivas se basan en la ocupación de casi un 99 por ciento que se registró en el último feriado, el 12 de octubre, y los fines de semana siguientes. Ziampris explicó que, casi como una nueva modalidad de asegurar un buen lugar para pasar las vacaciones, cada vez más familias llegan hasta los diferentes balnearios de la costa bonaerense para elegir y reservar personalmente casas y departamentos. “Esto, sumado al buen tiempo que estamos teniendo nos da no sólo buenos indicadores sino postales de verano en el mes de noviembre”.
Los aumentos de precios más fuertes en cuanto a alojamiento en la costa atlántica se registran en la hotelería de 4 y 5 estrellas y en las propiedades más lujosas, especialmente en los municipios históricamente más caros, como Cariló y Pinamar, donde los alquileres se encarecieronhasta un 40 por ciento en pesos. “Sin embargo, el fuerte de la costa es la hotelería tres estrellas y las casas y departamentos que constituyen el 80 por ciento de la capacidad total de hospedaje. En conjunto, el aumento de precios en este segmento en pesos está entre el 20 y el 30 con respecto a la temporada 2001-2002 mientras que la gastronomía y casi todos los demás servicios no fueron tocados en absoluto”, señaló Ziampris.
Aunque es probable que los precios de todos los productos y servicios sufran alguna rebaja hacia la segunda quincena de febrero y la primera de marzo, aún no está claro de cuánto será. Lo que si aseguran, funcionarios y empresarios del turismo, es que está será una temporada diferente a casi todas las anteriores. Después de muchos años, la mayoría de los argentinos optará por el turismo interno. “Esto en parte llevó a un comienzo temprano de la temporada y probablemente, si el buen tiempo nos acompaña, sea igual de buena también en febrero aunque siempre hay una diferencia”, agregó Ziampris.
Según datos aportados por un relevamiento de la Secretaría de Turismo y Deporte de la Nación, el crecimiento del turismo internacional que recibirá el país el próximo verano ya se verificó en las reservas de la empresa Southern Winds, que alcanzan el 100 por ciento para el vuelo Madrid-Buenos Aires, el 80 por ciento en los vuelos Miami-Buenos Aires de United Airlines y entre un 80 y 85 por ciento de ocupación en todos los vuelos de Lufthansa con destino a la Argentina para diciembre y enero.
En cuanto al turismo interno, los vuelos a Ushuauaia, Calafate e Iguazú registran niveles de ocupación que se acercan al 100 por ciento. Entre los destinos más visitados del interior del país, Córdoba espera una excelente temporada, con un incremento de alrededor del 30 por ciento en la cantidad de turistas, especialmente en las zonas de los valles. Según la Dirección de Turismo del gobierno provincial, a diferencia de otros destinos, los precios de alojamiento y comida prácticamente no fueron remarcados.
Producción: Paula Bistagnino.
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