El aumento registrado en alquileres y hotelería en la costa bonaerense vuelve a poner a Brasil como una oferta interesante para parte de los argentinos. La devaluación del real colocó a esa moneda en un valor similar al del peso argentino por lo que tanto los costos de alojamiento como de gastronomía están en un nivel equivalente en ambos países. Según los operadores turísticos, es muy probable que el grueso de los turistas se traslade por tierra, en micro o auto, y visite el sur de ese país. Es que, con el dólar caro, aunque las tarifas bajaron entre un 15 y un 20 por ciento con respecto al año pasado, el pasaje en avión se convierte en el costo más alto de unas vacaciones en Brasil.
“Un apart hotel, el tipo de hospedaje más común en Brasil, de 4 estrellas, para cinco personas y sobre la playa en Florianópolis, cuesta lo mismo que uno en Cariló, entre 100 y 130 dólares por día”, explicó Gabriel Sánchez, socio gerente de All Seasons, uno de los principales operadores turísticos del Brasil. Las consultas y reservas recibidas hasta ahora indican que Río de Janeiro, Buzios y Florianópolis serán los lugares más visitados por argentinos. “Somos conscientes de que hoy somos casi un artículo de lujo. Este año, el turista que busque arena blanca y agua clara y cálida va a elegir Brasil y no el Caribe. Será el dilema de las familias que tengan la suerte de pensar en unas vacaciones”, resaltó Sánchez.
Una evaluación hecha por la Secretaría de Turismo dice que a la inversa de lo que sucedió en años anteriores, durante la próxima temporada la proporción de brasileños que visiten la Argentina será mucho mayor.