Los trabajadores del subterráneo suspendieron finalmente el paro de actividades que tenían previsto realizar ayer de 19 a 22 en todas las líneas. Los sindicalistas dejaron sin efecto la medida de fuerza tras una reunión en el Ministerio de Trabajo y se mostraron dispuestos a sentarse a discutir con la concesionaria Metrovías las paritarias para el sector. “Este sería un principio de reconocimiento muy importante”, señaló a Página/12 el delegado de la línea C, Néstor Segovia. El sector busca desde hace dos años un reconocimiento gremial por fuera de la Unión Tranviarios Automotor, con cuya conducción mantiene un enfrentamiento.

El paro de actividades había sido convocado por la negativa de la empresa concesionaria a incluir a los empleados del subte dentro de las paritarias salariales. La huelga no llegó a concretarse porque la cartera laboral aseguró que desde mañana podrán sentarse a la mesa de negociación con Metrovías. Entre las demandas que los gremialistas plantearán en esa instancia estará el pedido de un 35 por ciento de aumento, un dos por ciento de incremento por antigüedad y 40 pesos en concepto de viáticos. “No vamos a decir que no hay más conflicto en el subte. Tenemos un conflicto pendiente por el que no vamos a abandonar la lucha que es reconocimiento gremial”, reconoció Segovia. Al mismo tiempo, el delegado celebró lo acordado con el jefe de Gabinete de Trabajo, Norberto Ciaravino. Apenas terminado el encuentro, los gremialistas comunicaron a las bases el resultado de la negociación y la medida fue levantada.