Los choferes de colectivos de la Línea 60 alcanzaron finalmente un acuerdo con la empresa sobre demandas laborales y anunciaron la suspensión del paro previsto a partir de la cero de hoy. El acuerdo se logró luego de tres días de negociaciones en el Ministerio de Trabajo, en el marco de un paro que comenzó el domingo a la noche con cortes de tránsito en la autopista Panamericana y una olla popular en la cabecera de la línea, en el barrio de Constitución.

Tras el encuentro en la cartera laboral, el delegado Daniel Farella informó que “a partir de la cero hora se levanta la medida de fuerza” y anunció que “la empresa se comprometió a pagar vacaciones adeudadas y a reconocer a los delegados”.

“El ministro (de Trabajo, Carlos) Tomada se puso de acuerdo con la empresa y hará que cumpla” el compromiso, expresó el delegado, al término de la reunión en la que participaron representantes de la empresa, el titular de la cartera laboral y dirigentes de la UTA.

Farella expresó que “a partir del lunes los delegados llevaremos al ministerio los reclamos por haberes mal liquidados desde diciembre y día a día se liquidarán todos. El ministerio pondrá una persona para que revise caso por caso”.

El acta firmada en el Ministerio de Trabajo, en tanto, dispuso que “los pagos cuestionados serán determinados por la Subsecretaría de Fiscalización del ministerio, un representante de la UTA y la empresa”.

También establece que la empresa abonará los días caídos por el conflicto, que comprenden la huelga y participaciones en asambleas, establece el acta, y sostiene que la compañía “pagará 1300 pesos, de los cuales 500 se depositaron en la fecha y 800 el lunes próximo”. En el punto 5, el acta obliga al diálogo entre la empresa y los delegados.

El encuentro en la sede del Ministerio de Trabajo, que fue acompañado por una protesta de choferes frente a la sede, comenzó a las 11.15, luego de que los trabajadores levantaran el corte parcial que realizaron a la mañana en la autopista Panamericana, donde un automovilista atropelló al hijo de uno de los trabajadores.

Previamente, el presidente de Monsa, Marcelo Pasciuto, denunció que los delegados gremiales habían tomado “a punta de pistola las cabeceras de Constitución y Maschwitz” y llegó a decir que los trabajadores “no quieren una solución del conflicto porque pretenden hacerse cargo de la línea con una cooperativa de trabajo”.

Para los dirigentes de la UTA, el corte de la autopista Panamericana que realizaron los choferes tiene “un origen político”. “No se puede usar a los trabajadores para defender determinada ideología política”, dijeron. Según el secretario de prensa del gremio, Mario Calegaris, “una vez que el reclamo se canaliza a través de las vías que corresponden, lo que corresponde es levantar el conflicto”.