SOCIEDAD › A LOS CASOS EN LEZAMA SE SUMAN LOS DE DOLORES Y CASTELLI
› Por Pedro Lipcovich
“Este año se adelantó el brote estacional de varicela, que suele aparecer a fines del invierno”, afirmó el director de medicina preventiva del Ministerio de Salud bonaerense. Se registraron 51 casos en Dolores y 16 en Castelli, además de los 87 que se anotan en Lezama. En todos los casos la evolución ha sido benigna, y las medidas preventivas consisten en no mandar al paciente al colegio (generalmente son chicos), mantenerlo aislado en casa y cortarle las uñas para que no se lastime si se rasca; cuando es conveniente, se vacuna a personas en contacto directo. El año pasado se registraron en todo el país más de 160.000 casos de esta enfermedad, que en general no presenta complicaciones.
Los 16 casos en Castelli se registraron a partir del 11 de este mes, en nenes de tres y cuatro años que asisten al mismo jardín de infantes. La actividad en el establecimiento se suspendió hasta el lunes que viene. Daniel Dehoar, director de Salud de esa localidad, indicó que “no se han dado casos en otros establecimientos, la situación está controlada”.
Ya unos días antes se había registrado un incremento de casos en la localidad de Lezama (a 30 kilómetros de Castelli), donde hoy ascienden a 87. “A partir de esa situación, el Servicio de Epidemiología entró en estado de alerta y vigilancia, y de los chequeos resultó la presencia de varicela también en otras localidades –contó Luis Crovetto, director provincial de medicina preventiva–: en realidad, esto nos tranquiliza, en cuanto a que no es un brote local, sino el brote estacional que aparece todos los años: habitualmente se da en septiembre, pero este año se adelantó, probablemente por las temperaturas templadas que prevalecen.”
Además de los de Lezama, Dolores y Castelli, se registraron 15 casos en Almirante Brown, dos en Marcos Paz y uno en Chascomús. “En ninguna de las localidades se presentaron complicaciones que requirieran internación, salvo dos casos en Lezama que ya se recuperaron”, puntualizó Crovetto.
La varicela se caracteriza por “pequeñas ampollas, vesículas con líquido, que aparecen primero en la parte superior del cuerpo y van bajando hasta los pies –explicó Crovetto–. Para cuando llegan a los pies, las lesiones de la cabeza generalmente ya cicatrizan, formando ‘cascaritas’”. “Es importante, además de la consulta médica, que el chico tenga las uñas cortas y las manos limpias, y evitar que se rasque todo el tiempo, para prevenir infecciones. Hay que bañarlo todos los días mediante una ducha rápida con agua y jabón, para mantener limpias las lesiones; no exponerlo al sol ni darle aspirina ni ibuprofeno; en general, la varicela no causa fiebre, y si la produce, el médico puede administrar paracetamol”, agregó Crovetto.
El contagio “empieza tres o cuatro días antes de los primeros síntomas; se transmite mediante las microgotas que se expelen al hablar y, cuando la enfermedad se declaró, por el líquido de las vesículas. Deja de contagiar cuando se formaron todas las ‘cascaritas’. Para evitar contagios es esencial el aislamiento del paciente; es posible vacunar a los contactos, aunque no siempre, ya que, si ya pasaron tres días del comienzo de la enfermedad, la vacuna no alcanza a hacer efecto. Con el apoyo de Nación, disponemos de vacuna para hacer frente a brotes”, agregó el funcionario.
En 2010 se registraron 162.779 casos de varicela en todo el país; en 2009 habían sido 88.748, y 158.813 en 2008, según datos del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica. En las 13 primeras semanas de 2011 se anotaron 15.784 casos.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux