El anunciado cierre de la tradicional confitería Richmond, patrimonio emblemático de la cultura porteña, y la apertura en ese lugar de una megatienda de una multinacional de indumentaria deportiva, hizo reaccionar a vecinos y diputados. Hoy comenzará a debatirse en la Legislatura un proyecto de ley para declarar sitio histórico al café situado en la peatonal Florida al 400.

Serán dos las iniciativas que tratarán los legisladores: la del Frente para la Victoria y Diálogo por Buenos Aires, y la del PRO. La intención es evitar el cierre o un posible cambio de rubro del local y que, incluso, se conserve el menú de la confitería. “Es lo que se llama el patrimonio gastronómico, ya que algunas especialidades que aquí se hacen no se encuentran en ningún otro restaurante de Buenos Aires”, explicaron funcionarios del Ministerio de Cultura porteño.

Creada en 1917, la Confitería Richmond fue el escenario habitual de reunión de políticos y escritores. En sus 1500 metros cuadrados decorados con estilo inglés, se congregaba el célebre Grupo Florida, que integraban escritores de la época como Jorge Luis Borges y Oliverio Girondo, entre otros.

El viernes pasado, vecinos y usuarios del bar, agrupados en la movida “54 bares”, organizaron a través de la red social Twitter distintas acciones en defensa del café. Entre ellas, un abrazo simbólico.