El fiscal que interviene en la causa por el doble crimen de las turistas francesas en la Quebrada de San Lorenzo, en Salta, pidió que tres de los detenidos por el hecho fueran acusados de encubrimiento. Eduardo Barrionuevo elevó el pedido al juez de Primera Nominación, Martín Pérez, quien debe resolver si hace lugar a la solicitud. El pedido del fiscal alcanza a los hermanos María Fernanda y Federico Cañizares, de 24 y 23 años respectivamente, y al guía de turismo de la empresa Puma Expedition Darío “Pajarito” Ramos, de 47, quienes para los investigadores no tienen vinculación con los homicidios, pero sí realizaron maniobras para encubrirlos.

Fuentes judiciales evaluaron como factible que el juez haga lugar al planteo del fiscal, por lo que hoy podría indagarlos por el nuevo delito imputado. En caso de que así sucediera, sus abogados podrían pedir que sean excarcelados, ya que el encubrimiento tiene una pena de entre seis meses y seis años de cárcel.

Las turistas francesas Cassandre Bouvier y Houria Moumni, de 29 y 24 años, fueron halladas asesinadas y violadas el 29 de julio. Las pericias revelaron que los crímenes se cometieron el 15 de julio, horas después de que las mujeres iniciaran una excursión por la quebrada.

El principal acusado del crimen es Gustavo Lasi, guía de turismo y ex empleado público, cuyo perfil genético fue hallado en el cuerpo de Moumni, según un análisis comparativo de ADN que se hizo en la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Lasi es el novio de María Fernanda Cañizares, quien fue detenida cuando se encontraron en su poder una cámara de fotos digital y un teléfono celular que pertenecían a las víctimas. Además, su hermano Federico, aspirante a policía, quedó detenido en la causa porque se encontraba en la casa en la que los investigadores hallaron el teléfono y la cámara.

La chica declaró que ambos objetos habían sido regalos de su novio, quien había contado que compró la cámara en un local y el teléfono a un compañero de trabajo. Las pericias determinaron que las memorias de ambos aparatos habían sido borradas, pero los investigadores lograron recuperar las últimas imágenes tomadas por las turistas.