Veinte casos de cáncer se han registrado en Francia en mujeres con implantes mamarios de la polémica empresa PIP, que vendió decenas de miles de prótesis de siliconas en el extranjero, incluso en Sudamérica, directamente o por intermediarios, según anunció ayer la agencia de productos sanitarios (Afssaps) de ese país. El organismo precisó no obstante “que no se ha establecido por el momento que estos casos de cáncer sean imputables a los implantes Poly Implant Prothèse (PIP)”.

Hasta el 28 de diciembre, se han registrado “tres casos de linfoma, quince casos de adenocarcinoma mamario (la forma más frecuente de cáncer de mama), un caso de adenocarcinoma de pulmón, una leucemia aguda mieloblástica”, informó la agencia.

El fundador de PIP, Jean-Claude Mas, de 72 años, es investigado por la Justicia francesa por “engaño agravado” y “homicidios involuntarios”. Según el cancerólogo y jefe de Afssaps, Dominique Maraninchi, con o sin prótesis, el cáncer de seno es frecuente y “una mujer de cada diez tuvo un cáncer de seno”.

Según otro comunicado de Afssaps publicado anoche, el número de cánceres de seno registrado hasta ahora en mujeres con prótesis PIP “sigue siendo inferior a la tasa observada en la población general”.

Según el nuevo balance, se han registrado 1143 rupturas de implante, así como 495 casos de reacciones inflamatorias. En las 672 extracciones preventivas de prótesis registradas por Afssaps, 23 rupturas fueron descubiertas y 14 casos de transpiración de la silicona.

Unas 30.000 mujeres se han hecho implantes de la empresa PIP, que utilizó de manera fraudulenta una silicona no autorizada, irritante. El gobierno francés recomendó retirar “a título preventivo” y “sin carácter de urgencia” los implantes, incluso si no presentan señales de deterioro, aunque aclaró que carece de pruebas de que esas prótesis incrementen el riesgo de cáncer, como se sospecha.