Al menos 16 personas murieron y unas 56 resultaron heridas el sábado por la noche, al chocar de frente dos trenes que se encontraron en la misma vía en Szczekociny, en el sur de Polonia. “Se trata de la peor catástrofe en muchos años”, comentó el primer ministro Donald Tusk, cuyo gobierno decretó un día de luto. Un sobreviviente relató que escuchó un ruido “ensordecedor” y vio que otros pasajeros salían volando de sus asientos. “Había pedazos de cuerpos en los vagones y en el exterior”, agregó.