“Nosotros tenemos más derechos que las estatuas.” Bajo esa consigna se movilizaron ayer vecinos de las villas de la ciudad de Buenos Aires y ocuparon pacíficamente las sedes de Edesur y Edenor para reclamar al gobierno porteño que disponga la instalación de transformadores y medidores de luz en sus barrios. “La situación de riesgo que hay en los barrios nos llevó a tomar esta medida de fuerza, por la que conseguimos firmar un acuerdo con la Ciudad”, contó Sebastián D’Amato, integrante de la organización Corriente Villera Independiente.

El reclamo derivó en las firmas de dos actas acuerdo. En una, el director de la Unidad de Gestión de Intervención Social (UGIS), Carlos Pedrini, y las prestatarias se comprometieron a instalar 12 transformadores en el plazo de un mes y medio en las villas del sur. Para la zona norte, el Instituto de Vivienda (IVC) se comprometió a instalar tres transformadores. Ambas obras deben ponerse en marcha a partir del 15 de agosto.

“Pagaron 50 millones de pesos para darle luz a plazas y monumentos y los barrios siguen sin electricidad”, se quejó D’Amato sobre la deuda que mantiene el gobierno con las empresas. Además, denunció que “se queman casas y electrodomésticos porque hay cortes constantes y sistemáticos”.

La solución al problema es que haya tendido eléctrico dentro de las villas, lo que implica la instalación de medidores en las casas y transformadores. Sin embargo, las empresas explicaron que “para colocar medidores en hogares tiene que haber urbanización”. Por ende, la realidad no se modificará en tanto no se cumpla con ese requisito. “En los barrios ponen un nudo y los vecinos debemos engancharnos, así se sobrecarga y se queman los cables”, contó Rafael Klejzer, referente barrial.

La movilización fue organizada: los habitantes de las villas del sur de la ciudad ocuparon la sede de Edesur, en San José al 100, y quienes viven en la Villa 31, 31 bis, Playón de Chacarita y la Carbonilla tomaron la sede de Edenor, en Guzmán al 200. Luego de lograr el compromiso de la Ciudad, levantaron las tomas.