Mientras transcurre el –hasta ahora– segundo agosto más lluvioso de la historia en el área metropolitana, hasta la noche de ayer cerca de 700 personas habían sido evacuadas o se habían autoevacuado en distintos puntos de la provincia de Buenos Aires. Para algunas localidades, el agua caída en las últimas semanas equivale y hasta supera los promedios anuales habituales. Entre el Gran Buenos Aires y las poblaciones de zonas rurales, el paisaje incluye rutas anegadas, cinco de ellas cortadas para evitar accidentes, campos que no escurren, construcciones con grietas, casas en las que el agua se hizo dueña.

Azul y Tres Arroyos se encuentran entre las localidades más perjudicadas. “Estamos en el pico de agua, ésa es la sensación porque creíamos que a las 10 de la mañana estaba el pico y creció un poco más, y en este momento no vemos indicios de que baje”, graficaba al caer la tarde el intendente de Tres Arroyos, Carlos Sánchez. En esa ciudad, estaban “al borde los terraplenes de los arroyos”; había evacuados por las autoridades, pero también por decisión propia.

En tanto, gran parte del casco urbano de Azul donde, por el desborde del arroyo, el agua había llegado a los 40 y 50 centímetros, se encontraba inundado. La inundación allí es la segunda de la semana, y la tercera del mes. El agua también ingresó a la ciudad desde el sur, por el desborde de la Ruta 3, anegada debido al agua registrada en campos de la zona. Una cantidad no precisada de vecinos se negó a abandonar sus casas por temor a los robos, al tiempo que circula la convocatoria para una marcha el domingo, en reclamo de obras que permitan prevenir nuevas inundaciones. Al mismo tiempo, ayer en Necochea se aprestaban albergues para eventuales evacuaciones.

Tras analizar la situación con el gabinete de emergencia, el gobernador Daniel Scioli había dispuesto que “los ministros se dirijan a las zonas más afectadas por las inundaciones, para poner a disposición todo lo que sea necesario a las familias que están viviendo momentos muy angustiantes”. El mandatario también agradeció “al gobierno nacional que nos está ayudando de distintas maneras con aspectos logísticos y atención social a los damnificados”. Entrada la tarde, funcionarios de los gobiernos nacional y provincial conformaron un comité para el seguimiento de la situación hídrica, que antes del miércoles dará a conocer sus conclusiones.

Pasado el mediodía, los relevamientos del Consejo Provincial de Emergencias indicaron que, en doce municipios bonaerenses, 257 personas evacuadas se sumaron a las 420 que ya permanecían en albergues desde la semana pasada. La mayoría son habitantes de La Matanza (200), seguidos por 130 de General Pueyrredón, 100 de Tres Arroyos, 65 de Pilar, 42 de San Cayetano, 32 de Necochea, 31 de Laprida, 26 de Olavarría, 14 de Tandil, 13 de Lobería, 12 de Azul y otros tantos de González Chaves.

Las crecidas de los cauces de agua en distintas localidades motivaron un operativo en el que, según explicó el ministro de Desarrollo Social, Martín Ferré, “cada área del gobierno provincial puso a disposición sus capacidades técnicas, operativas y logísticas, a través de personal especializado, maquinaria pesada, camiones de doble tracción y equipos de monitoreo, entre otros elementos, para asistir a los municipios afectados por la acumulación de agua”. El funcionario también señaló que la administración bonaerense articuló “con la Secretaría de Espacio Público y el gobierno nacional para entregar frazadas, colchones, zapatillas, ropa, alimentos, chapas y clavaderas”.

Por la tarde, el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Norberto Yauhar, convocó hoy a conformar un comité para el seguimiento de la situación hídrica, que evalúe comportamientos de ríos y arroyos. Yauhar, su par bonaerense, Gustavo Arrieta; el secretario de Coordinación Político Institucional y Emergencia Agropecuaria de la Nación, Haroldo Lebed, y equipos de emergencia estimaron que arribarán a conclusiones antes del miércoles. El ministro Arrieta, informó un comunicado, se encuentra “en contacto permanente” con las autoridades nacionales para “reunir información certera y detallada sobre la afectación de suelos en parcelas productivas”.

Hasta entonces, Arrieta detalló que entre el temporal de días pasados y las tormentas más recientes, la caída de agua ha sido de “más de 60 milímetros para Azul, y mayor aún en Tandil”, además de que se registraron “intensas lluvias en los partidos de Olavarría, Las Flores y Tapalqué”, mientras que “en el cordón este de las sierras de Tandilia, Lobería y San Cayetano se registraron más de 80 milímetros”. Eso “determina una inundación mantiforme generalizada con caminos cortados y desborde de arroyos”.

Ayer cinco rutas continuaban cerradas al tránsito, mientras que otras seis acumulaban agua sobre la calzada. La Dirección de Vialidad provincial informó que entre Tres Arroyos y Coronel Pringles se encontraba cortada la Ruta 85; que en la 75 persistían cortes señalizados y balizados. Además se registraban cortes en tramos de la 74, la 29 y la totalidad de la 70, en Lincoln.