Celestina Jara, de 49 años, y su nieta Natalia, de 10 meses, miembros de una comunidad originaria Qom de Formosa, murieron atropelladas el domingo pasado por un auto que conducía el gendarme Walter Cardozo. Las víctimas viajaban en moto con Ricardo Coyipe, pareja de la fallecida, quien denunció ayer: “Estaba debajo del auto, con las piernas heridas. Cuando vi venir al gendarme pensé que me iba a auxiliar. Pero, sin embargo, me dio una trompada y patadas en el estómago”. El hombre desestimó que se hubiera tratado de un accidente. “Fue un homicidio”, afirmó.