“Siempre me preguntaba como íbamos a hacer para contar lo que pasó; porque una cosa es el Nunca más, con el relato crudo y espeluznante de la tortura, pero cómo contar lo que pasó desde el punto de vista político, personal”, dice el periodista Sergio Bufano desde el monitor de la computadora. Él mismo es ahora parte de este intento de transmitir lo que ocurrió durante los ‘70. Su testimonio y el de muchos otros que vivieron de cerca la época de la última dictadura militar, junto con documentos gráficos y audiovisuales, conviven en un CD multimedia elaborado por la organización Memoria Abierta, que la Secretaría de Educación porteña repartió a las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires. El objetivo es generar en las aulas un debate en el que los docentes puedan responder los interrogantes que plantean los alumnos.
“La memoria escolar está hecha más bien de rituales patrióticos que celebran héroes y triunfo, pero ahora se trata de recordar una tragedia, un vacío que golpea cierta representación de la Nación. ¿Cómo incluir esta tragedia en la secuencia de una patria conducida por héroes a la grandeza?”, se preguntó el psicoanalista Hugo Vezzetti, el sábado, durante una charla organizada por la Escuela de Capacitación (CePA) de la Secretaría de Educación porteña, donde se debatió acerca de cómo contar los ‘70 en las aulas. Vezzetti, autor de Pasado y Presente. Guerra, dictadura y sociedad en la Argentina, señaló ante un auditorio conformado por maestros que hay una tendencia a explicar el terrorismo de Estado “como un fenómeno que surgió espontáneamente y como un accidente, un hecho ajeno, como si la nación hubiese estado ocupada por una potencia extranjera”. Lo que hay que lograr para comprender la época, advirtió, es indagar acerca de lo que unió, y no lo que separó, a la sociedad con la dictadura.
En armonía con este criterio, el CD Otras voces de la historia no inicia su intento de explicación sobre el terrorismo de Estado en el golpe del 24 de marzo de 1976, sino que se remonta a los bombardeos en la Plaza de Mayo de 1955, el Mayo francés y el Cordobazo.
“El objetivo del régimen instalado en 1976 fue reprimir las iniciativas de movilización de los años previos y paralizar a la sociedad. Había que eliminar los focos de resistencia y los lazos sociales que amenazaran la posibilidad de sentar las bases del modelo económico de explotación que finalmente instalaron y que hoy padece la Argentina”, se define en el CD. Pero el aporte a la comprensión de lo que fue la época no está dado por las explicaciones o definiciones que aparecen en el material, sino por los relatos de los protagonistas “a partir de una selección de testimonios producidos por el archivo oral de Memoria Abierta”: las canciones, los discursos y las propagandas de televisión de aquellos años, que apuntan a enriquecer la percepción de los alumnos y docentes. Ejemplos de esto son el relato de Taty Almeida, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, quien narra su educación antiperonista, y las palabras de Virginia Croatto, cuyo padre fue asesinado en 1979. “Cuando vivía en Cuba, nunca pensaba en que la gente se moría naturalmente. Para cualquier nene es un descubrimiento que la gente se muere de viejo. Para mí, si no la mataban, no se moría”, asegura.
El material privilegia la irrupción de las víctimas, de las “otras voces” que quisieron ser calladas, pero también incluye a los represores. Así, se puede escuchar cómo en 1981, el dictador Roberto Viola decía que “la Argentina es un país esencialmente democrático, cuyos comandantes tienen un respeto por los aspectos fundamentales del sistema democrático: la libertad, la justicia, el orden y la seguridad”.
Según Alejandra Naftal, de Memoria Abierta, no hay una única vía para contar lo que sucedió. Por eso, explica, se privilegió un soporte quepermitiera abordar el tema de diferentes formas y por distintos lugares. El CD no apunta a “bajar línea” sino a proporcionar las herramientas para generar una comprensión y elaboración de lo ocurrido por parte de los alumnos. Como señaló Inés Dussel, coordinadora del área de Educación de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO): “No hay memorias puras ni se necesita tener héroes para explicar que lo que ocurrió estuvo mal”. La pedagoga, autora de Haciendo Memoria en el País del Nunca Más, afirmó que “la enseñanza es nuestra obligación, aunque el aprendizaje es optativo. Lo que cada uno hace con lo que le enseñamos no podemos ni debemos controlarlo”.