“La del mono” se ha extendido en Estados Unidos hasta el punto de suscitar un alerta nacional. Se trata de la “viruela del mono”, que por primera vez ha sido detectada en Occidente. Sus síntomas son parecidos a los de la viruela humana, pero usualmente no resulta letal, y es transmitida por animales. Endémica en Africa central y occidental, habría llegado a América del Norte a través de animales exóticos importados para su venta. Hay 19 personas infectadas en tres estados del centro del país y, hasta ahora, nada sugiere la posibilidad de una acción bioterrorista.
Desde mediados de mayo, enfermaron 17 personas en Wisconsin, por lo menos una en Indiana y otra en Illinois. Los síntomas son parecidos a los de la viruela común (erradicada del planeta por la vacunación), y consisten en fiebre, tos, chuchos de frío y erupción cutánea. Todos los afectados habían estado en contacto con “perros de las praderas”, animales de la familia de los topos, comprados como mascotas en casas de animales.
El Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) siguió el rastro del contagio hasta un vendedor de animales en Milwaukee, cuyos perros de las praderas habían estado en contacto con ratas de Gambia, obtenidas de un distribuidor en Illinois. Estos roedores –de la familia de los topos– habrían llegado de Africa. La “viruela del mono” es endémica en selvas tropicales del oeste y centro de ese continente, y no se la había registrado hasta ahora en Europa o América; es causada por un virus de la familia Orthopox, la misma de la viruela humana.
James Hughes, jefe de enfermedades infecciosas del CDC, observó que “no sabemos el origen de estas ratas, ni el volumen de las importaciones de ratas de Gambia en Estados Unidos” y admitió que “animales de ese mismo distribuidor pueden haber sido vendidos en varios otros estados”.
El sábado, el CDC dio el alerta nacional a médicos, veterinarios y el público en general, para que estén atentos a esos síntomas en personas o animales domésticos que hayan estado expuestos a perros de las praderas o ratas de Gambia. Las especies susceptibles incluyen primates y conejos.