El nanosatélite argentino Capitán Beto fue lanzado exitosamente en la madrugada de ayer. Se trata de una sonda de observación de sólo dos kilos de peso, y dimensiones de veinte por diez centímetros. Lo fabricó en Bariloche la empresa Satellogic, incubada a su vez por Invap en el marco de un programa de respaldo nacional a emprendimientos innovadores. La financiación corrió íntegramente por cuenta del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación, que invirtió 6 millones de pesos. El cohete portador despegó de China. Los desarrolladores argentinos del nanosatélite, liderados por Emiliano Kargieman, Gerardo Richarte y Eduardo Ibáñez, lo bautizaron Capitán Beto en homenaje a una célebre canción del fallecido cantante Luis Alberto Spinetta.