SOCIEDAD
› NEGRO PANORAMA POR LA BAJA VENTA DE PAQUETES
Las agencias tocan fondo
“No podemos seguir así, la venta de paquetes al exterior cayó en un 90 por ciento y las agencias hoy no pueden vivir sólo del turismo nacional.” “En septiembre, después de los atentados, creímos que habíamos tocado fondo, pero ahora estamos peor y ya no sabemos cuán profundo está ese fondo.” Las afirmaciones, tan pesimistas como la realidad argentina misma, pertenecen a representantes de diferentes asociaciones que nuclean a las agencias de turismo del país, quienes, aún sin datos firmes, advierten sobre “una disminución espectacular” en la demanda de paquetes turísticos para la temporada veraniega que concluye y auguran un futuro cercano más que oscuro, “a menos que la situación económica mejore y la política se estabilice”.
“La caída es del 90 por ciento en la venta de paquetes al extranjero y del 50 por ciento en los nacionales, además de la gran cantidad de cancelaciones recibidas desde el exterior, que en el caso de Estados Unidos llegan al 40 por ciento.” El informe de la situación lo ofreció Marco Palacios, presidente de la Cámara Argentina de Turismo, que engloba al rubro gastronómico y hotelero además de agencias turísticas. “No es que no alcance con el movimiento turístico interno. El problema es que sólo el 13 por ciento de éste se maneja a través de agencias. La mayoría reserva y viaja por su cuenta”, agregó Palacios a Página/12.
Antes del corralito y la devaluación, llegaba a 120 mil la cantidad de personas ocupadas en las cerca de tres mil agencias nacionales. “Desde diciembre a la fecha, cerraron muchas agencias y van a cerrar muchas más, y aunque desconocemos la cantidad de despidos, imaginamos que se debe tratar de un porcentaje muy alto”, comentó Daniel Manfredi, presidente de la Asociación de Agencias de Viajes de Buenos Aires. El funcionario hizo mención al caso de una de las cadenas de agencias más importantes de la Capital y el conurbano bonaerense –cuyo nombre prefirió mantener en reserva–, que en los últimos meses cerró 8 de sus 16 locales y despidió a casi la mitad de sus empleados. Al margen de este caso, más que representativo, Manfredi especificó que “en su mayoría se trata de empresas muy pequeñas, que primero se endeudan, luego disminuyen la oferta de paquetes y finalmente dejan de funcionar”. “Otro fenómeno que se ve es el de la fusión entre las Pymes del sector, motivado por las agobiantes deudas que sufren muchas de ellas”, sostuvo Manfredi.
Al tiempo que exigen políticas gubernamentales más “agresivas” para reflotar el sector, los operadores no pierden las esperanzas: “Si la situación se estabiliza, la Argentina post devaluación podría ser muy atractivo para el turismo internacional”.