En Tucumán, un estudiante de 15 años, cansado de las bromas que le hacían, hirió hoy con un disparo en la cabeza a un compañero, quien fue internado, pero no se hallaba anoche en grave estado. El incidente se produjo en la escuela 230, de la ciudad de Simoca, ubicada a unos 35 kilómetros al sudoeste de la capital provincial. Fuentes de la investigación indicaron que el autor del tiro era víctima de acoso escolar por parte de sus compañeros. Aparentemente, ayer éstos le habían arrebatado una gorra, tras lo cual el muchacho fue a buscar un arma –un revólver calibre 38– y en el recreo atacó a uno de sus rivales, de 16, en una canchita ubicada dentro del predio del establecimiento. El comisario Héctor Figueroa, jefe de la Regional Sur, informó que “la víctima fue trasladada al Hospital de Simoca y luego al Padilla, aunque su estado no es de gravedad”. La policía secuestró el revólver calibre 38 largo utilizado por el agresor. Autoridades del hospital informaron que el chico atacado “ingresó caminando con una herida de arma de fuego localizada en la región frontal”. Inmediatamente, mediante radiografías, los médicos constataron la presencia de la bala localizada en un hueso, zona donde produjo una pequeña fractura, aunque los parámetros vitales del chico están normales.