SOCIEDAD
› ASUMIO EL DIRECTOR GAY EN CORDOBA
Todo por una elección
El obispo de San Francisco protestó por la designación de un profesor homosexual al frente de una escuela media. Especialistas en educación sostienen que la elección sexual no lo inhabilita.
El profesor gay, que el lunes pasado fue designado director de una escuela secundaria en la localidad cordobesa de San Francisco, tras ganar un concurso organizado por el Ministerio de Educación provincial, asumió ayer su cargo a pesar de que un grupo de padres y la Iglesia rechazaron su nombramiento. El propio obispo local alzó su voz de protesta: “Un educador no sólo tiene que tener idoneidad técnica sino también físico-psicológica y ética”, dijo. Especialistas en educación consultados por este diario rechazaron los cuestionamientos y coincidieron en que “no se puede evaluar la idoneidad de un docente por su elección sexual”.
Marcos Giordano asumió ayer como director del Ipem 315, en San Francisco, una ciudad a 209 kilómetros de la capital cordobesa. Fue el último acto de una obra que comenzó el año pasado cuando decidió presentarse a un concurso organizado por el Ministerio de Educación provincial para que se ocuparan 254 vacantes a cargos de director en escuelas de enseñanza media: a pesar de que se habían inscripto 630 aspirantes, sólo 192 aprobaron las cuatro instancias de la evaluación. Uno de ellos fue Giordano, un profesor de Economía y Contabilidad, “que siempre tuvo un desempeño excelente e inobjetable”, según afirmó la ministra del área, Amelia López.
Pero un grupo de padres de alumnos criticó “la manera de vestir y de expresarse” de Giordano y fundamentó su rechazo al nombramiento en una norma provincial que establece que el docente “debe observar una conducta pública y privada acorde con la función educativa”. “Yo no soy ni gay, ni travesti; desde el punto de vista psicológico me considero transexual”, se había definido el profesor.
El obispo de la diócesis de San Francisco, Baldomero Martini, dijo a este diario que “la educación no puede ser improvisada, tiene que ser integral y sin ambigüedades de ninguna especie”. Para Martini, la designación de profesores homosexuales como directores, “es un problema del Ministerio y de los padres, que no pueden lavarse las manos y deben analizar y evaluar esta situación”. “La educación y los modelos son importantes para que un chico no sea un hombre ambiguo”, agregó.
Página/12 consultó a investigadores y directores de escuelas respecto de la polémica que provocó el nombramiento de Giordano: “Es muy complicado juzgar la idoneidad de las personas por su orientación sexual. La sexualidad es una decisión personal y creo que está bien que se conozca la pluralidad de elecciones. Me pregunto qué les estamos haciendo a los chicos cuando decimos que hay sexualidades prohibidas”, dijo la coordinadora del área de educación de Flacso, Inés Dussel.
“El problema es cómo la sociedad argentina se piensa a sí misma. Nuestro sistema educativo está construido sobre la idea de homogeneidad cultural y la diversidad no es aceptada. La identidad sexual tiene que ver con la intimidad y lo principal es que se pueda construir esa identidad de un modo libre y con respeto”, señaló la investigadora Silvia Finocchio.
Para el rector del Colegio Nacional de Buenos Aires, Horacio Sanguinetti, “el hecho de que este director sea gay no lo inhabilita en su función mientras no utilice la escuela como coto de caza”. En tanto que el ministro de Educación nacional, Daniel Filmus, respaldó la decisión del Ministerio cordobés y dejó en claro que “no hay ninguna normativa que impida que los homosexuales ejerzan la docencia”.
El profesor, al enterarse de que finalmente se convertiría en el nuevo director de la escuela en donde enseña desde hace un año, dijo: “Después de este proceso que fue difícil para mí y toda mi familia, esto es un desafío”.