Luego de que la Unidad de Información Financiera (UIF) pidiera su apartamiento por posible parcialidad, el juez Ricardo Sanjuan se inhibió por “razones de violencia moral” y no resolverá en las apelaciones presentadas en la causa por asociación ilícita y lavado de activos que tiene nueve personas procesadas y por la que están detenidos Rubén “La Chancha” Ale, su ex mujer María Jesús Rivero y su ahijado Fabián González. Hace casi veinte días, la UIF había recusado al camarista, tras señalar que existe “interés” de Sanjuan y su hijo “como ex dirigente y actual dirigente respectivamente” del Club San Martín de Tucumán, íntimamente relacionado con las actividades de La Chancha y su círculo bajo investigación. Junto con otros cuatro magistrados, Sanjuan integra la Cámara Federal de Apelaciones de Tucumán que debe resolver apelaciones de afectados por la investigación que lleva adelante el Juzgado Federal Nº 2, a cargo de Fernando Poviña. Ahora, la Cámara debe designar un reemplazante antes de resolver las apelaciones. La investigación por la que hay nueve procesados, dos de ellos prófugos luego de que se les dictara prisión preventiva, no llegaría a debate oral al menos hasta principios del año próximo.

En diciembre del año pasado, Ale y Rivero fueron detenidos luego de que Poviña solicitara su procesamiento con prisión preventiva, junto con los de González, que fue detenido poco después; Roberto Dilascio, pareja de Rivero, y Víctor “Pelao” Suárez. Los dos últimos aún permanecen prófugos. Ale cumple con su preventiva en la Unidad Coronaria del Sanatorio Modelo, donde está internado luego de que pidiera detención domiciliaria por motivos de salud. Entre diciembre y ahora, las condiciones de su detención se volvieron más rígidas, se reforzó la guardia y se restringieron las visitas. Fuentes de la investigación señalaron que esos cambios obedecieron a que “la situación se había empezado a descontrolar”. Rivero había pedido traslado de penal, pero continúa en la cárcel de mujeres.

En la recusación, la UIF había advertido su “temor de parcialidad” sobre la futura actuación de Sanjuan en el caso, “particularmente en relación con su interés y específicamente el de su hijo, Ricardo Matías Sanjuan, como ex dirigente y actual dirigente respectivamente del Club Atlético San Martín de Tucumán”. Ale y su entorno tienen una vinculación estrecha con ese club, del que fue dirigente y cuya conducción económica estuvo en manos de la Gerenciadora NOA, vinculada con sus socios y su ex socia y ex mujer Rivero.

La recusación de la UIF recogió una serie de artículos periodísticos que dan cuenta de la estrecha vinculación de los Sanjuan con el club “incluso en reciente fecha”, porque las noticias más recientes datan de mediados de marzo de este año. Además, “su hijo, el Dr. Ricardo Matías Sanjuan, se encuentra de-sempeñando el cargo de vocal titular 1º de la citada institución, como parte de la Comisión Directiva correspondiente al período 2013/2014”. “El magistrado y su hijo tienen interés en el proceso, habida cuenta de revestir el carácter de socios y de ex dirigente y dirigente del Club Atlético San Martín y encontrarse dicha institución perjudicada por las maniobras desplegadas por la asociación ilícita investigada”. La entidad deportiva es “damnificada directa” de lo investigado en la causa y “sus directivos y socios tienen la obligación y el derecho de reclamar por el daño producido, velar por el cuidado del patrimonio y el interés social, así como también eventualmente podrían llegar a ser requeridos por la Justicia para colaborar con el esclarecimiento de la verdad material”. El magistrado debía ser apartado de las actuaciones por sus intereses relacionados con el club, que configuran “afectación de la garantía de imparcialidad del juzgador”.

En su recusación, la UIF también solicitó que los magistrados libren “oficio a la citada institución” deportiva para que detalle qué relación mantienen el juez y su hijo con ella.

En la causa también se encuentran procesados, aunque sin prisión preventiva, el hermano de La Chancha, Angel “El Mono” Ale, y otras tres personas.