SOCIEDAD › EN EL PARQUE NACIONAL LANíN, DE NEUQUéN, EL FUEGO AFECTó 120 HECTáREAS VERDES
El calor, la escasa humedad y los vientos alimentaron dos focos de incendio, uno en Neuquén y otro en Río Negro. En el Parque Nacional Lanín, el foco avanzaba desde las cercanías de una población mapuche, donde no se reportaron heridos.
Dos focos de incendios forestales avanzan en distintas regiones de la Patagonia, uno en la provincia de Neuquén y otro en Río Negro, aunque en ambos casos las autoridades aseguraron que las llamas, que son combatidas por un centenar de bomberos, miembros de Defensa Civil y auxiliares de los parques nacionales respectivos, no ponen en riesgo poblaciones cercanas. En el Parque Nacional Lanín, de Neuquén, el fuego afectó unas 120 hectáreas de vegetación nativa como araucarias, radales y cipreses, y alcanzó las copas de un bosquecillo implantado. En las afueras de Bariloche, el fuego, que había sido controlado, recrudeció y comenzó a expandirse hacia el sudoeste, entre la Ruta 40 y el lago Nahuel Huapi.
En el Parque Nacional Lanín, el incendio comenzó el domingo pasado, alrededor de las 15.30, en el Paraje del Contra, una zona poco visitada por el turismo, a unos 15 kilómetros de la desembocadura del lago Huechulafquen, cercano a Junín de los Andes. Ayer avanzaba fuera de control por la margen sur del lago, por lo que era combatido por cuatro aviones hidrantes y un helicóptero con helibalde. Las llamas habían prendido en pastizales, arbustos, cipreses, radales y araucarias, detalló la vocera del parque, Marina Zocatelli, quien agregó que por ese avance, y por seguridad, fue cortado el camino de acceso al Paraje del Contra, ubicado en el corazón del lugar. El foco inicial estuvo, además, en cercanías de la población Neira y Briceño, de la comunidad mapuche Lafquenche, donde no se reportaron heridos ni daño a viviendas.
Anoche aún no habían sido precisadas las causas del incendio, aunque los investigadores señalaron que podría haber comenzado tras algún descuido de visitantes al parque, que dispone de un área específica para acampar. En la zona, esta es la época seca del año, lo que, en caso de incendios, eleva el índice el peligrosidad hasta un grado extremo.
Personal del parque señaló que si el fuego enciende extensiones amplias de pastizales, podría crecer muy rápidamente y cubrir enormes dimensiones. Ayer, en el lugar trabajaban 45 personas, entre rescatistas del parque, Defensa Civil de Neuquén, bomberos voluntarios de Junín de los Andes, Prefectura Naval y pobladores, quienes coordinan con el Plan Provincial de Manejo del Fuego la tarea en la zona y planifican el relevo de personal para los próximos días. Además, Prefectura colabora en la tarea de traslado de equipos desde la desembocadura del lago hasta la zona del incendio por la vía lacustre.
En tanto, alrededor de las 13.30, en las afueras de Bariloche, a la altura del kilómetro 2073 de la Ruta 40, recrudeció un incendio que había sido controlado por los bomberos locales. “Hubo un rebrote en la cola del incendio anterior. Se habría reactivado por el viento que viene del sector nordeste, la alta temperatura y la baja humedad y por el momento se encuentra fuera de control”, informó ayer la vocera del Parque Nacional Nahuel Huapi, Larisa Beletzky.
“La situación climática hizo que el incendio se expandiera rápidamente y tomara dirección al lago. Ahora está en dirección sudoeste y avanza a alta velocidad, sobre superficie no quemada”, detalló, antes de advertir que el siniestro “no representa ninguna amenaza ni para la población de Bariloche, ni de Villa La Angostura, ya que se encuentra a varios kilómetros de ambas localidades”. Desde el centro de Bariloche se avistaba una columna de humo negro, proveniente de unos dos kilómetros al oeste de donde se produjo el incendio inicial. Fotos de la columna, elevada y densa, circularon por las redes sociales durante la tarde. Las llamas eran combatidas por brigadistas, camiones y un avión hidrante.
La municipalidad de Bariloche recordó a turistas y visitantes que declaró un “alerta rojo” por los incendios forestales. Por ello, sólo es posible acampar y hacer fuego en lugares habilitados, así como es obligatorio apagar cualquier incendio que se produzca con abundante agua para evitar que se reactive. Las autoridades también recomendaron no lanzar colillas de cigarrillos encendidas y no dejar botellas de vidrio al sol, para evitar que el reflejo pueda provocar un nuevo incendio.
A los habitantes, la municipalidad les recordó que desde el 1º de octubre y hasta el comienzo de abril rige la prohibición de quemar residuos forestales. Además, la dirección de Defensa Civil y el Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales (Splif) recordaron el pedido de que la población extremara las precauciones durante el verano, para prevenir posibles incendios como los que ayer avanzaban.
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