Tras las declaraciones del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, que calificó de “intencionales todos los incendios” forestales desatados en Río Negro y Chubut, un equipo de peritos de la Policía Federal de Buenos Aires viajó a Bariloche para investigar las causas de los siniestros en la zona céntrica de la ciudad lacustre y en la Villa Turismo de la ciudad de El Bolsón. En la región, la lluvia dio un respiro a los brigadistas, pero los focos son numerosos y se presentan en diferentes localidades. El último informe detalló que ya son 34 mil las hectáreas arrasadas en Chubut.

En Bariloche, el incendio fue apagado el mismo domingo, pero conservaba “puntos calientes”, como denominan los bomberos a las estructuras y elementos con brasas encendidas, en los que el fuego puede reactivarse. También indicaron que hay un edificio con riesgo de colapso.

El juez de Instrucción Ricardo Calcagno, que está a cargo de la causa, designó a los peritos federales para realizar el trabajo de campo y peritaje en las zonas en las que se produjeron los focos de incendio ubicados en el faldeo del cerro Runge, en la ciudad de Bariloche, y en el barrio Villa Turismo, en El Bolsón. Calcagno indicó que la investigación buscará determinar las causas de los siniestros.

Aníbal Fernández había dicho que los incendios son intencionales y que el fuego “responde a un interés inmobiliario”. “La situación en la que estamos inmersos es de provocación, lisa y llana”, dijo el funcionario y apuntó que “todos los incendios son intencionales y no hay un incendio que sea por situaciones de climatología”. Según Fernández, se trata de un “interés inmobiliario” porque “hay terrenos muy bien ubicados con determinadas dimensiones, con una arboleda de años, milenaria, de gran valor” y como “no pueden hacer uso de ellos, provocan los incendios”.

En las áreas protegidas, el bosque o “vuelo” pertenece a la órbita provincial mientras que las tierras son fiscales, o privadas. Sin la existencia del bosque, estos terrenos pueden ser reclamados por la provincia o los propietarios para otros fines.

Ayer, una tenue precipitación aplacó desde la media mañana la actividad del fuego en la región andina de Chubut y Río Negro e hizo bajar la temperatura, condiciones que se estima se mantendrán por poco tiempo y deberán ser aprovechadas al máximo.

En Cholila, “la lluvia es más importante hacia el flanco sur (del incendio), donde está el Parque Nacional Los Alerces, sobre el que había alguna preocupación extra porque en algún momento hacia allí avanzaban las llamas”, explicó Diego Pedretti, licenciado en ciencias de la atmósfera, que es parte de la unidad operativa.

El domingo fue una jornada de extrema tensión para los brigadistas porque las llamas superaron un cortafuegos estratégico de 13 kilómetros que se había construido sobre ambas márgenes del arroyo El Pedregoso y comenzaron a avanzar en dirección este, impulsadas por el viento hacia la Villa del Blanco. Así lo confirmó el coordinador del Plan Nacional de Manejo del Fuego, Fernando Epele.

El ingeniero forestal, con 30 años de trayectoria en Chubut, fue nombrado interinamente coordinador del Plan Nacional de Manejo del Fuego por Aníbal Fernández, quien se constituyó en Cholila este fin de semana y sobrevoló la zona afectada, con él y el gobernador Martín Buzzi.

Durante el fin de semana se registraron nuevos focos en Lago Puelo y en El Bolsón, que pudieron ser contenidos por los brigadistas, pero aún no están apagados.

En el cerro Currumahuida, que separa las localidades de Lago Puelo y El Hoyo, el fuego persiste. “El incendio en el cerro Currumahuida se encuentra controlado, se hizo una faja bastante ancha en todo su perímetro, toda la gente de la brigada estuvo trabajando ahí arriba”, dijo Iván Yuziuk, jefe de bomberos voluntarios de El Hoyo. La población más cercana se encuentra aproximadamente a 700 metros y está fuera de peligro. Hasta ahora no se registran daños materiales.

En tanto, el incendio originado en el Parque Nacional Lago Puelo ya está controlado, según informó el guardaparque Marcos Ocampo, quien dijo que en estos momentos se están llevando a cabo las tareas de extinción. “El fuego se inició en inmediaciones de la playa de estacionamiento”, dijo Ocampo, quien aseguró que el incendio “no se originó por causas naturales”. Se estima que la superficie afectada en el parque Lago Puelo ronda las 42 hectáreas de vegetación heterogénea y fuera del parque hubo alrededor de cinco focos secundarios.