Cuatro jóvenes armados, incluida una chica, se subieron a un colectivo que iba por la localidad bonaerense de Dock Sud, Avellaneda, con la idea de cometer un robo, pero terminaron repelidos a tiros por un policía de civil que se encontraba entre los pasajeros. El efectivo disparó contra dos adolescentes e hirió a un tercero, que logró escapar junto con la joven. Uno de los ladrones murió en el colectivo de un balazo en el tórax, mientras que otro fue herido en un brazo. Personal policial que acudió para realizar los peritajes halló muerto a cien metros del lugar del hecho al tercer asaltante. En tanto que la joven que acompañaba a la banda logró huir –aparentemente ilesa– y es intensamente buscada.

Cerca de las 6.30 de ayer, en el cruce de la avenida 12 de Octubre y la calle Estanislao del Campo, en el sur del Gran Buenos Aires, cuatro delincuentes armados –tres jóvenes y una chica de entre 15 y 18 años– subieron al interno 269 de la línea 33 que se dirigía hacia el centro porteño. En la misma parada subió el subteniente primero de la Policía Bonaerense Ramón González, quien –vestido de civil– se sentó en la parte del medio del colectivo. Se dirigía a prestar servicio en la comisaría 10ª de Tres de Febrero.

Según relató el titular de la Jefatura Departamental de Lanús de la Policía Bonaerense, comisario mayor Edgardo García, cuando los jóvenes se disponían a robar el efectivo hirió con su arma reglamentaria a dos de los asaltantes, a uno en un brazo y a otro en el tórax, y pudo reducirlos sin dificultades. En tanto, los dos cómplices restantes aprovecharon que el conductor del ómnibus frenó el vehículo, bajaron y escaparon a la carrera, a menos de una cuadra de donde todo había comenzado.

De acuerdo con el relato del jefe policial, González decidió enfrentarse a los jóvenes pese a que era superado en número e inmediatamente se dio a conocer como policía. El comisario remarcó “el profesionalismo” con el que actuó el agente de seguridad: “Ante el peligro inminente, reaccionó y fue muy cauto arriba del micro, ya que tanto el chofer como todos los pasajeros resultaron ilesos”.

González se comunicó luego con la comisaría local para dar aviso de lo sucedido, por lo que poco después se presentaron en el lugar varios patrulleros y una ambulancia, que trasladó a los dos heridos al hospital Pedro Fiorito. Ya en el centro asistencial de Avellaneda, quien había recibido un disparo en el pecho (de 17 años) falleció mientras era intervenido quirúrgicamente. Su cómplice (de 15 años) recibió las curaciones correspondientes y se encontraba fuera de peligro.

Asimismo, el comisario García relató que el personal policial que arribó a la zona a efectuar diversos peritajes, “descubrió a cien metros del lugar del hecho a un tercer sujeto que se había escondido entre dos vehículos; también estaba fallecido”. Era el tercero de los ladrones, un joven de unos 20 años que no fue identificado y quien, pese a que resultó gravemente herido durante el tiroteo, consiguió recorrer una cuadra antes de caer desvanecido junto al cordón de la vereda. En el lugar fueron secuestradas dos réplicas de 9 milímetros y una pistola calibre 22 con la numeración suprimida. Las autoridades policiales continuaban buscando a la cuarta integrante de la banda, una adolescente, aunque aún sin resultados positivos. Interviene en la causa la Fiscalía Penal Juvenil 1 del Departamento Judicial Lomas de Zamora, a cargo de Martín Seara.