En 428 ciudades del mundo se realizaron ayer manifestaciones, por tercer año consecutivo, para protestar en contra de la empresa de biotecnología de suministros de alimentos Monsanto, a la que se acusa de contaminar la tierra y enfermar a miles de personas con el glifosato, químico que se utiliza para la siembra de soja transgénica. Más de tres millones de activistas de todo el mundo protagonizaron este sábado una multitudinaria marcha internacional en contra de la gigante de la biotecnología estadounidense Monsanto. Al menos 428 ciudades de 38 países se unieron a la protesta con el propósito de crear conciencia sobre los peligros que representa la empresa estadounidense al modificar genéticamente alimentos que consume la sociedad. En Buenos Aires, centenares de personas se reunieron en la Plaza San Martín, en la zona de Retiro, y los actos con igual motivo se reprodujeron en localidades de las provincias de Córdoba, Misiones, Entre Ríos, Chaco y otras zonas del país donde el glifosato está haciendo estragos en la salud de la población, sobre todo en niños y en adolescentes que viven en los pueblos fumigados con ese producto.