El cielo se puso negro, a media mañana, sobre Buenos Aires y alrededores, y tenía sus razones. Era el preludio del temporal de viento y lluvia que se abatió luego sobre el área metropolitana y otros puntos de territorio bonaerense, que provoccó la voladura de techos, caída de árboles, algunas inundaciones y más de 1100 personas afectadas y evacuadas.
Según informó Defensa Civil bonaerense, los partidos más afectados fueron Florencio Varela –donde unas 800 personas resultaron afectadas por las inundaciones–, Ezeiza, Almirante Brown, Esteban Echeverría, Lomas de Zamora, Quilmes, Presidente Perón, La Plata, Saladillo, General Belgrano y Chascomús.
La caída de ramas y carteles y los techos de chapa arrastrados por el viento fueron los hechos más comunes registrados en esos distritos. En la zona sur del Gran Buenos Aires, también cayeron ramas sobre los tendidos eléctricos y muchos usuarios quedaron sin electricidad a desde el mediodía, según confirmó la empresa Edesur. En La Plata se inundaron algunos barrios bajos pero no hubo evacuaciones y en Saladillo unas 150 personas resultaron afectadas por la voladura de techos.
En la ciudad de Buenos Aires, la lluvia y el viento derribaron 80 carteles y 100 árboles, según precisaron fuentes de la Subsecretaría de Logística y Emergencias. La titular de ese organismo, Lía María, recorrió diversos barrios junto a las cuadrillas de la Guardia de Auxilio que recogían las ramas y objetos caídos.
La mayoría de los destrozos fueron ocasionados por carteles publicitarios y de inmobiliarias, caidos en la calle por efecto del viento. Pero el desmoronamiento más importante ocurrió en una farmacia de la avenida Rivadavia 7263, a dos cuadras de Plaza Flores, donde la cartelería, su marquesina y parte de la mampostería cayeron a la calle desde cinco metros de altura, sin lastimar a nadie.
Los móviles del gobierno porteño también recorrieron las zonas más vulnerables a las inundaciones para limpiar la basura de los sumideros que obstaculiza el escurrimiento del agua de lluvia. La emergencia continuaba anoche, en virtud del alerta dispuesto por el Servicio Metereológico.