Chano, Santiago Moreno Charpentier, el cantante de la banda Tan Biónica, chocó o se llevó puesto un número impreciso de autos –dos, según la fiscalía: ocho. según los vecinos– al entrar a contramano por Mendoza y Artilleros con su inmensa Dodge RAM 4x4 negra. El múltiple choque, que no hubiera pasado de eso, un choque múltiple, tomó vuelo porque el conductor era Chano, porque fue atacado a golpes, y porque según el acta policial se manifestaba en forma “incoherente”, lo que para algunos rápidamente significó que había consumido alguna sustancia tóxica. La cuestión es que en lugar de un diferendo sobre aseguradoras, la escena culminó en una suerte de salvajada a golpes que dejó al artista con fisuras de costillas, costuras y un ojo complicado.

Alrededor de las 23, Santiago “Chano” Moreno Charpentier chocó contra varios autos estacionados sobre la calle Mendoza, en el barrio de Belgrano, y según la explicación de algunos vecinos intentó escapar, algo que le resultó difícil por el estado en que se encontraba.

Según algunos testimonios, el músico embistió primero una Toyota Hilux e intentó escapar. Dobló por Mendoza pero era contramano, y empezó a embestir vehículos, subió a la vereda, intentó dar marcha atrás para girar y volvió a chocar otros autos. También abolló el portón metálico de una casa.

Según los testigos, un grupo de personas rodeó el vehículo, rompió la ventanilla y sacó al cantante a la fuerza para empezar a golpearlo y dejarlo tirado en la calle. “Le pegaron bastante. Fueron piñas y patadas. Lo dejaron inconsciente”, dijo un hombre a la prensa y sostuvo que el cantante de Tan Biónica “estaba alcoholizado y falopeado”.

Sin embargo, el fiscal de la Ciudad, Luis Cevasco, sostuvo que el músico se negó a realizar el test de alcoholemia, por lo que se actuó de oficio.

Más tarde, Canal 13 difundió un protocolo del Sanatorio de la Trinidad del que supuestamente surgía que un análisis realizado dio positivo a la presencia de cocaína y marihuana en orina. Mientras que el abogado de Chano, Gabriel Iezzi, negó que se tratara de un informe oficial del centro de salud.

Fuentes judiciales informaron que según el parte policial el cantante, que permanecía ayer internado en el Sanatorio de la Trinidad, “no se hallaba aparentemente en estado normal, ya que su relato era contradictorio y en ocasiones incoherente, evidenciando la posible ingesta de alguna sustancia tóxica”. El acta policial informó que al músico no se le pudo tomar declaración porque “era incoherente en algunas de sus expresiones, hallándose además lesionado”, por lo que se lo derivó al Hospital Pirovano. En el hospital lo revisaron, le hicieron las primeras curaciones, pero como su estado no revestía gravedad lo derivaron a la clínica privada.

Iezzi dijo que Moreno Charpentier recibió ocho puntos de sutura en la boca y un “ojo comprometido”, además de dos costillas fisuradas, y consideró posible que sea dado de alta hoy. El abogado insistió en que el informe que circuló con el protocolo de salud no fue reconocido como “oficial” por las autoridades de la clínica y tampoco consta en la causa.

En tanto, la fiscalía Correccional de los barrios de Saavedra y Núñez, a cargo de Claudia Katok, que también investiga el incidente en Belgrano, difundió un comunicado en el que asegura que Moreno Charpentier embistió “dos vehículos y un portón con su camioneta durante la madrugada, tras haber sido atacado, según la versión del cantante, por un grupo de simpatizantes de River Plate”.

Es decir que por un lado está abierta la causa que investiga si conducía tras haber ingerido sustancias tóxicas, y por otro la que investiga la salvajada.