El hombre que estuvo un año prófugo por el doble femicidio de una madre y su hija en el barrio porteño de Constitución y fue detenido el lunes con otra identidad en Santa Fe se negó a declarar ayer ante la Justicia. Se trata de Juan José Campos, de 48 años, cuyo caso se reavivó públicamente tras la difusión en Página/12 del reclamo que venían haciendo las amigas de la chica asesinada. La cobertura televisiva de la marcha permitió que el acusado fuera reconocido y terminara preso.

Al ser indagado en el Palacio de Tribunales porteño, Campos decidió no declarar por el doble femicidio de Elizabeth Angélica Wilson, de 44 años, alias Romina, y de la hija de ésta, Stefanía Abril Wilson, de 19, y continuará detenido.

La fiscal Mariela Labozzetta, que está al frente de la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM) y tuvo un papel importante en la investigación –ya que a su fiscalía llegó el dato de que el prófugo estaba viviendo en Santa Fe–, confirmó que “en el juzgado informaron que Campos se negó a declarar”. Labozzetta también adelantó que en los próximos días le pedirán formalmente al fiscal original de la causa por el doble crimen, Justo Rovira, que le permitan “colaborar en el expediente” para llevar cuanto antes al imputado a juicio oral. Además, la fiscal destacó en diálogo con este diario que desde la UFEM lograron una imputación por doble femicidio en lugar de homicidio agravado por el vínculo.

Campos fue detenido el lunes en la ciudad de Santa Fe luego de permanecer un año y dos días prófugo, en un operativo conjunto entre la Delegación de esa provincia de la Policía Federal (PFA) y de la División Homicidios de la fuerza que viajaron para chequear si el señalado era el prófugo.

La sospecha surgió el viernes cuando familiares y amigos de las víctimas realizaron frente al Congreso Nacional una marcha para recordar a las víctimas. La difusión que tuvo en los medios esa movilización permitió que una mujer que vive en la capital santafesina reconociera a un vecino suyo en una de las fotografías que identificaban a Campos bajo el título de “femicida”.

La mujer, que tenía ciertas dudas, se contactó a través de redes sociales con una de las amigas de las víctimas para aportar el dato de que el presunto femicida vivía en Santa Fe con la falsa identidad de Guillermo Aráoz junto a una mujer y con su hija adolescente, cuyos perfiles eran similares a las víctimas de Constitución. “Estamos muy contentas y agradecidas con esa familia de Santa Fe que se portó tan bien”, expresó a este diario Mercedes Villarreal, una de las amigas de Abril que recibieron la comunicación.

“Se contactaron con nosotras, nos mostraron fotos de este hombre y no quedaron dudas de que era él. Automáticamente elaboramos un escrito para que quede constancia porque muchas veces los operativos policiales son ineficientes y el prófugo vuelve a escapar”, explicó la joven. “Agradecemos el valor que tuvieron los vecinos para denunciar. Mucha gente avisa pero no denuncia porque tienen miedo, claro, estamos hablando de un femicida, pero hay que animarse a denunciar”, agregó.

Un investigador policial aseguró que a esta nueva pareja santafesina, Campos “la engañó y conquistó” para ir a convivir con ella, de la misma manera que había logrado relacionarse con su víctima de Constitución, es decir, a través de la red social Facebook.

“Resaltamos que esto se logró por la lucha, por animarnos y no quedarnos en el dolor. Lo único que podemos decirle a quienes están en esta situación es que resistan y no descansen en el dolor”, expresó Mercedes. “Ahora viene una nueva etapa, la del juicio, y esperamos que se haga efectiva la prisión preventiva para él”, concluyó la joven.