El jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, anunció que se intensificarán en la ciudad los operativos para detectar la falta de uso de cascos protectores en los motociclistas y de cinturón de seguridad en los automovilistas. “La seguridad vial no es un tema individual sino de toda la sociedad”, explicó y destacó que tras la aplicación de las multas fotográficas disminuyó la velocidad promedio de circulación de tránsito en la Capital Federal.
“Cuando comenzó el sistema de multas fotográficas, el descenso de infracciones fue brusco. Pero se sigue excediendo la velocidad de circulación. Se maneja más despacio, aunque persisten las altas velocidades. También disminuyeron los malos estacionamientos”, explicó la directora de Seguridad Vial porteño, Leticia Piris. En comparación con otros años, ahora se labran menos actas por exceder el límite de velocidad permitido. Y la velocidad promedio por la que se aplican las multas es de 112 kilómetros por hora, que antes era de 135.
Con respecto a los nuevos operativos de tránsito, Ibarra advirtió a los motociclistas que “van a venir los procedimientos y vamos por el objetivo de que el 100 por ciento de los que usen una moto tenga casco”. “A aquel que esté sin casco, se le retendrá la moto, hasta que lo consiga. Cuando vuelva, se le cobrará el servicio de custodia de la moto. Le va a salir más barato usar casco que no usarlo”, explicó.
Piris aclaró luego que “no es una guerra contra los motoqueros. Comprendemos cuando una moto es un elemento de trabajo”. Por ello, informó que las autoridades del área ya se reunieron con motoqueros, representantes de la Cámara de Servicios de Mensajerías y con quienes brindan el servicio delivery, para concientizarlos sobre el uso de los cascos.
“Estamos realizando gestiones para que los dueños de las mensajerías efectivicen a los motoqueros y además que les brinden todas las disposiciones de prevención, entre ellos, el casco”, aseguró la funcionaria.
En cuanto al cinturón de seguridad, el jefe de Gobierno adelantó que habrá controles policiales en los ingresos de la ciudad, aunque informó que en los últimos tiempos “se mejoró la cultura de lo que era años atrás; la gente tomó más conciencia”.
La multa por no usar casco oscila entre 50 y 500 pesos; por no usar cinturón de seguridad entre 50 a 500 pesos; por exceder los límites de velocidad entre 140 y 1000 pesos, y por estacionar en lugares prohibidos entre 140 a 700 pesos. En cuanto a las muertes por accidentes de tránsito en los lugares donde se aplica el sistema de multas fotográficas en el año 2001 ascendió a 175; en 2002 fueron 107 y en 2003, hasta setiembre, sumaron 71.
Según las estadísticas de la asociación Luchemos por la Vida, en 2003 sólo el 20,60 por ciento de los conductores en la zona porteña usan cinturón de seguridad, los acompañantes del conductor en el asiento delantero lo usan en un 19,30 por ciento y en un 3,20 por ciento quienes viajan en el asiento trasero. En el caso de los choferes de taxis, lo usan en un 15 por ciento. Por otra parte, la utilización de cascos por parte de quienes conducen motocicletas y ciclomotores es del 47 por ciento.
Ibarra también señaló, con respecto a las medidas de control de venta de bebidas alcohólicas y sanción de los comercios porteños que no cumplan con la Ley Seca, que ayer comenzó la segunda etapa que consiste en la clausura preventiva del local infractor y que en caso de reiterarse la infracción puede determinarse la clausura definitiva.