Marta Cejas, la esposa del ex jefe de Inteligencia del gobierno juarista de Santiago del Estero, Antonio Musa Azar, se entregó ayer en el Destacamento Móvil 5 de la Gendarmería Nacional de esa provincia tras permanecer prófuga de la Justicia durante tres meses por la causa del doble crimen de La Dársena. La decisión fue tomada tras conocerse la remoción de la jueza María del Carmen Bravo por parte del interventor Pablo Lanusse, anunciada en la noche del miércoles último.
“De acuerdo con la actuación de la doctora Bravo no había ningún tipo de garantías para ser sometido a una investigación”, estimó Raimundo Ledesma, el abogado del comisario retirado. El letrado confió que “casi todos” los prófugos en el caso, entre ellos “Musita” Azar Cejas, se entregarán en las próximas horas a la Justicia santiagueña.
Cejas, quien había cambiado su fisonomía para evitar ser reconocida, se entregó a las 8 en el destacamento de Gendarmería, donde quedó detenida e incomunicada bajo custodia de personal femenino. Bravo, una de los cinco juezas que estuvieron a cargo de la causa por los homicidios de Leyla Nazar y Patricia Villalba, había pedido la captura de la mujer, a quien acusó de “encubrimiento agravado”, por supuestas amenazas a testigos.
En tanto, su hijo “Musita” y su sobrino Eduardo Abdala, ambos prófugos, están imputados de “homicidio”, en relación con el crimen de Leyla.