SOCIEDAD
Denuncia de un camarista
El camarista federal platense Leopoldo Schiffrin denunció ayer haber sido víctima de “mensajes amenazantes e intimidatorios” que habrían aparecido en graffitis sobre los muros del frente de su domicilio, en la ciudad de La Plata. Schiffrin, en su presentación ante el juez federal Arnaldo Corazza, señaló que los graffitis podrían estar vinculados a una investigación interna por presuntas irregularidades del juzgado federal platense de Julio Miralles, en el otorgamiento de amparos al corralito. Otro camarista, Román Frondizi, también había recibido amenazas en su vivienda en Capital Federal. Schiffrin precisó en la denuncia que el diseño artístico de los graffitis realizados en el frente de su casa resultaban difíciles de leer. Pero la sospecha del magistrado es que en dichas pintadas escribieron palabras como “orka” y “sangre”. Además, Schiffrin sostuvo que este tipo de pintadas no se repetía en ningún otro frente de las casas ubicadas en la misma cuadra, y consideró que a su juicio constituyen “un contexto amenazante”.