El ex agente penitenciario Carlos Montenegro y el cabo de la Armada Gustavo Fernández fueron detenidos acusados de ser los presuntos responsables del asesinato de Maximiliano Argüello, el joven de 16 años que murió luego de recibir un disparo aparentemente efectuado por uno de los dos imputados, mientras perseguían a unos hombres que les habrían robado una camioneta. El hecho ocurrió el 20 de noviembre pasado en una esquina del barrio de San José, partido bonaerense de Almirante Brown, mientras el adolescente esperaba el colectivo con su novia.
Las detenciones se llevaron a cabo luego del resultado de las pericias balísticas del arma 9 milímetros que había sido secuestrada en la casa de Montenegro, a horas del asesinato, y las declaraciones de diez testigos. Las pericias determinaron que las cápsulas halladas en el lugar donde mataron a Argüello fueron disparadas por el arma secuestrada a Montenegro.
Su amigo, el cabo Fernández, que reside en San José, a metros de la casa donde vivía Maximiliano, está imputado por encubrimiento agravado. Ambos declararon ayer ante el fiscal de Lomas de Zamora Guillermo Morlaschi.
Según algunos testigos, entre ellos la novia de Maximiliano, el joven había quedado en medio de la balacera que Montenegro y Fernández (aún no se precisó si los dos disparaban) desataron contra los presuntos delincuentes que habían intentado robarles una Trafic. El adolescente fue herido y luego llevado al Hospital Oñativia de Rafael Calzada, donde murió. Los detenidos fueron alojados en una comisaría de El Jagüel, en Esteban Echeverría.