El ex capitán del Ejército Rodolfo Correa Belisle –uno de los siete oficiales que el martes fueron sobreseídos en la causa por el encubrimiento del crimen del soldado Omar Carrasco– rechazó la sentencia judicial que lo declaró inocente, por prescripción de la causa, a once años de ocurrido el hecho. “Está probado en la causa por homicidio que algunos militares asesinaron al soldado, pero en la causa por el encubrimiento está probado que la muerte de la verdad histórica y la justicia es exclusiva responsabilidad de los funcionarios judiciales que actuaron para terminar siendo parte del encubrimiento”, aseguró el militar. “Quiero ser sometido a juicio oral para demostrar mi inocencia”, reclamó el ex capitán en una presentación judicial.
Correa Belisle pidió una aclaración a la Justicia por considerar que los términos de la sentencia “son injuriantes” hacia su persona. En el fallo que dispone su sobreseimiento y el de otros jefes con mayor rango, el presidente del tribunal, Orlando Coscia, formuló una crítica severa al desempeño de los militares involucrados en el caso de la muerte del conscripto: “Deben quedar advertidos de que las prescripciones decretadas no borran el delito”, escribió el juez, para luego rematar diciendo que “solamente una acción funestamente corporativa de estos militares pudo llevar a la concreción de tan lastimoso escenario”. “Esas acciones ofendieron a la ciudadanía que reclamaba lo mejor de ellos”, se lee al final de la sentencia.
“Lo que dice el fallo no se ajusta a la verdad de los hechos y me coloca en una situación de deshonra”, declaró el ex militar al diario Río Negro. “No pueden decir que soy culpable y absolverme. Yo quiero que se haga el juicio.” Correa Belisle denunció en su momento la cadena de encubrimientos dentro del cuartel de Zapala donde ocurrieron los hechos, revelando que la causa judicial “fue armada por personal de Inteligencia militar”.