Profesionales de la salud y entidades que nuclean a empresarios del sector anunciaron un paro nacional para el próximo 15 de septiembre. La medida de fuerza se llevará a cabo tanto en el ámbito público como en el privado y tiene como objetivo central reclamar mayores partidas presupuestarias para la salud y aumentos salariales para todos los trabajadores del sector. También exigen el pago de las deudas que mantienen con el sector las obras sociales y el PAMI, entre otros puntos. El martes, la multisectorial se reunirá con el jefe de Gabinete, Alberto Fernández.
Del paro de actividades participarán clínicas, hospitales y sanatorios públicos y privados, así como entidades que nuclean a médicos, enfermeros, psicólogos, odontólogos, nutricionistas, kinesiólogos, entidades de diagnóstico y servicios de emergencias. Los motivos de la medida fueron explicados en una conferencia de prensa: “En la peor crisis de 2001, 2002 y 2003 dimos nuestro apoyo y eso llevó a que los indicadores de salud no cayeran, algo que no pasó en ningún otro país que saliera de un default”, aseguró Gustavo Mammoni, el titular de la Confederación Argentina de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados.
“Tenemos clínicas cerradas, aranceles no actualizados y deudas del PAMI”, enumeró el especialista, antes de fundamentar: “Hoy apostamos por otro país, porque estamos en otras circunstancias”.
Según se ocupó de subrayar Raúl Magariños, titular del Consejo Federal de Entidades Médicas Colegiadas, desde “hace varios meses” buscan una solución para los problemas que motivaron la medida de fuerza. “Hasta ahora no encontramos respuesta de las autoridades nacionales. Recién ayer (por el miércoles) tuvimos una comunicación del ministro de Salud, Ginés González García, anunciándonos que el martes a las 11.30 seremos recibidos por el jefe de Gabinete, Alberto Fernández”, comentó.
Por el momento, las expectativas están centradas en esa reunión: “Si hay apertura de un canal de diálogo, plantearemos que se discuta el levantamiento del paro”, afirmaron. En principio, está previsto que la medida de fuerza se extienda durante 24 horas. Durante ese lapso, se suspenderán todas las actividades médicas programadas, aunque se atenderán las emergencias y las guardias serán reforzadas.
“No vamos a ser cómplices de la pérdida del derecho a la salud de los ciudadanos”, consideró Magariños. También dio algunos datos sobre los números que maneja el sector. “El promedio de los aranceles de las consultas es de 6 pesos. En tanto, un médico que se desempeña en el ámbito público gana, por hora, entre 4 y 5 pesos de promedio.”
Los principales puntos del reclamo son los siguientes:

- Mayor presupuesto para la salud.

- Aumento salarial con estabilidad laboral para todos los trabajadores de la salud, públicos y privados.

- Aumento de los aranceles profesionales e institucionales.

- Pago de las deudas que mantienen con el sector las obras sociales y el PAMI.

- Disminución de la carga tributaria del sector. “Para no perjudicar la salud de la población pedimos que se resuelva este tema, porque pagamos impuestos por facturaciones que no cobramos”, señaló Mammoni.
Por otra parte, el titular de la Confederación de Médicos de la República Argentina (Comra), Gustavo Jáñez, afirmó que “el paro se decidió a la luz de los conflictos de todo el país, no es sólo por el caso emblemático del Garrahan, que es la punta del iceberg. Más abajo existen diversas instituciones de salud con la misma problemática”.
En declaraciones a Página/12, Jáñez aclaró que se solidarizan con el reclamo salarial de los trabajadores no profesionales de ese hospital, pero no están de acuerdo “con la metodología del paro salvaje. No tenemos vocación piquetera, no somos gente de hacer paro”, dijo. Asimismo, el titular de Comra subrayó: “No peleamos exclusivamente para que se aumenten los salarios. También lo hacemos pensando en que se asigne un mejor presupuesto para el sector”.

Informe: Daniela Bordón.