En forma sorpresiva, mientras en la vecina Cipolletti recrudecen las críticas por la falta de resolución judicial a notorios crímenes ocurridos en el alto valle durante los últimos años, ayer fue detenido por orden judicial Nicolás Rinaldi, de 25 años, el ex novio de María Alejandra Zarza, la joven embarazada de ocho meses que apareció asesinada en una laguna de Neuquén en febrero pasado. El juez Alfredo Velasco Copello, que en dos oportunidades había desechado el pedido del fiscal en ese sentido, ayer ordenó la detención de Rinaldi, aunque en ningún momento se aclaró cuál es la acusación concreta en su contra. Existen dudas sobre si se lo considera autor material, partícipe necesario o entregador.
La detención se produjo días después de que se conocieran los resultados de la segunda autopsia sobre el cuerpo de Zarza. La nueva pericia determinó que la muerte se produjo por asfixia, aunque no se pudo determinar si fue por ahorcamiento o por sofocación. La nueva autopsia se hizo también para tratar de determinar qué ocurrió con el embarazo, ya que no se encontró el feto. Extraoficialmente se dijo que los peritos “no pudieron determinar si el bebé murió o si eventualmente podría estar vivo”, señalaron fuentes allegadas a la investigación.
A las 16.30 de ayer, vestido con una campera marrón, Rinaldi salió esposado de su domicilio en Neuquén, escoltado por personal policial que se movilizaba en un automóvil Ford Fiesta. Rinaldi fue el último que vio con vida a la joven Zarza, de 25 años, con quien tuvo una cita el 19 de febrero, día en el que se produjo la desaparición de la chica. Su cadáver fue encontrado el 26 del mismo mes, semisumergido en una laguna cercana al río Limay, en una zona conocida como Valentina Sur. Rinaldi ya no estaba de novio con Zarza, pero se sospecha que podría ser el padre del bebé que ella estaba esperando y que la cita había sido concertada porque la chica quería que él reconociera esa paternidad.
El abogado Rodolfo Quesada, que representa a la familia de la víctima, declaró ayer que ellos estaban esperando la detención. “No estamos sorprendidos porque ya dijimos muchas veces que existían elementos de juicio como para que Rinaldi esté en prisión”, sostuvo. Los padres de la chica dijeron que confiaban en la Justicia. “Fueron tres meses de espera que se nos hicieron muy largos, pero teníamos fe y ahora tenemos la esperanza de que el bebé esté con vida. Ojalá Dios y la Virgen nos escuchen y que podamos recuperar a la criatura”. Rinaldi, en distintos reportajes periodísticos, se había declarado inocente.