“Lo que nos extraña es que un médico oncólogo como Tabaré Vázquez permita que se instalen en Uruguay industrias que provocan cáncer”, sentenció Pedro Pavón, miembro de la Asamblea Ciudadana Ambiental que impulsa los cortes en contra de la instalación de las papeleras en la vereda uruguaya. El dirigente anunció que a partir del viernes volverá a bloquearse el paso fronterizo de Gualeguaychú con Fray Bentos, justo cuando se inicia el recambio turístico quincenal. Igual medida se implementará en el puente Colón-Paysandú y, posiblemente, en el de Concordia-Salto.

Este viernes “a partir de las 17 se efectuará un corte de 24 horas pero, como se fue sumando gente para cubrir guardias, puede ser que se extienda por el resto del fin de semana”, relató Pavón a Página/12.

En los últimos cortes participaron alrededor de “tres mil personas entre vecinos, gente de otras ciudades, de Uruguay y de Buenos Aires, que viene a apoyar este reclamo”.

Las interrupciones serán en el Puente General San Martín, 8 kilómetros antes de la cabecera y en el puente de Colón-Paysandú, 90 kilómetros al norte de Gualeguaychú. También se analiza la posible interrupción del tránsito en la ruta que une Concordia y Salto.

Para lo que resta de la temporada se pronostican “cortes imprevistos entre semana. Acá sale un auto con parlante dando aviso a la comunidad, los comerciantes van cerrando sus locales para ir plegándose al reclamo. Sí se realizarán seguro los cortes en fin de semana”.

Hoy a las 20.30 habrá “una asamblea con gente de organizaciones de Colón, Concepción de Uruguay y Concordia para ver cómo se sigue con el reclamo”, recalcó Pavón y enfatizó que “el tema cada vez se pone más complicado”. En los últimos seis meses se efectuaron “alrededor de 10 cortes. En todo este tiempo lo bueno fue que la gente fue concientizándose más acerca de este problema”.

La Asamblea Ambiental inició un registro voluntario de vecinos que quieran adherirse, lo que permitirá la rotación de personas en el lugar del corte. El objetivo de los piquetes es “demostrar al país hermano que tenemos economías interdependientes y que, si ellos hacen un emprendimiento que nos afectará, podemos hacer cosas que los afecten, pero no por venganza sino como demostración al gobierno de que es necesario dialogar”, indicó Lidia Moyano, también miembro de la Asamblea.

En ese sentido Moyano indicó que Uruguay, al permitir en forma unilateral la construcción de papeleras que podrían contaminar el medio ambiente, “está violando un tratado internacional” que establece una administración compartida del río fronterizo.

Mientras tanto, al otro lado de la orilla, ecologistas del Movimiento Mundial por los Bosques criticaron duramente el proyecto de instalación de una fábrica de celulosa en la zona central del país, en la ribera del río Negro. En relación con la proyectada tercera planta, cuyo lugar de emplazamiento no fue definido aún, el ecologista Ricardo Carrere afirmó que la iniciativa de la empresa sueco-finlandesa Stora Enso es tan contaminante como los proyectos de Botnia y Ence. La tercera planta “servirá para acentuar el proceso de extranjerización de la tierra, sin generar nuevas fuentes de trabajo en el medio rural”, dijo.

Carrere afirmó que el movimiento que integra está desarrollando una campaña mundial contra las tres plantas y precisó que en el plano local la organización se propone agitar en el ámbito político para alertar a la población a fin de impedir la construcción de esas fábricas.