SOCIEDAD
› CRECIO UN 25% LA DEMANDA EN CENTROS DE SALUD
La leche no alcanza para todos
› Por Eduardo Videla
La demanda de leche en polvo para niños de hasta cinco años, embarazadas y madres en período de lactancia, creció un 25 por ciento en los últimos cinco meses y puso en crisis el programa materno infantil para los sectores carenciados, que se implementa en los centros de salud porteños. Como cada vez se inscribe más gente en ese plan –muchos, provenientes del Gran Buenos Aires– y el stock es el mismo del año pasado, la porción que le toca a cada uno se achica y ya se están generando problemas en los centros asistenciales. Como si fuera poco, la licitación para la compra de leche destinada al segundo semestre fue declarada desierta, por falta de interés de los proveedores.
El plan materno infantil fue, en principio, un programa financiado por el Ministerio de Salud nacional. “Pero en lo que va de este año, la Nación no nos giró las partidas y lo estamos financiando con recursos de la ciudad”, dijo a este diario la directora de Atención Primaria de Salud, Daniela Daverio. El año pasado, el programa entregó 280.720 kilos de leche en polvo a través de los centros de salud, ubicados en los barrios más carenciados de la ciudad. Los beneficiarios inscriptos eran alrededor de 14.000: niños de seis meses a cinco años de edad, mujeres embarazadas y las que dan leche materna a sus bebés que, en teoría, deben recibir dos kilos por mes. En los centros de salud, la entrega de leche va acompañada de un seguimiento sanitario de cada uno de los beneficiarios.
“La mayor demanda proviene, por un lado, de gente de clase media o desocupados, que antes no solicitaban la leche, o de vecinos del otro lado de la General Paz –explicó Daverio–. En promedio, el aumento es del 25 por ciento.” Esta mayor demanda comenzó a tener su efecto en los centros de salud, donde la gente que concurre a buscar su cuota de leche en polvo se encuentra, muchas veces, con que lo que hay –si es que hay– no es suficiente. “No hay falta de leche, tenemos stock hasta julio. Si no alcanza lo que se envía es porque hay mayor demanda”, argumentó la funcionaria. Y sostuvo que para atender la necesidades, el año que viene habrá que aumentar la provisión a 350.000 kilos de leche.
Para este año, las cartas parecen estar echadas. El Gobierno llamó a licitación para la compra de 150.000 kilos, para el segundo semestre, pero ninguna empresa quiso cotizar con el precio de referencia ofrecido, de 4,50 pesos por kilo. Durante todo 2001, se pagaron 2,45 pesos por kilo. ¿Por qué las empresas no aceptaron un precio superior al 80 por ciento? Los proveedores no quieren mantener ese precio durante los seis meses de vigencia de la licitación, con pagos a los 60 días. Ante esta circunstancia el Gobierno estudia la forma de hacer compras mensuales.