En Chaco, en medio de la huelga de hambre de una decena de aborígenes hace 14 días, la presidenta de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, reclamó ayer la renuncia del gobernador provincial, Roy Nikisch, al término de una reunión de algo más de una hora con los manifestantes en la Casa de Gobierno provincial. La titular de la organización señaló que las Madres “vamos a llevar una carta al Presidente de pedido de audiencia porque él y el ministro de Salud tienen que intervenir”. Bonafini denunció que entre quienes participan del reclamo “hay una persona que tiene tuberculosis y chagas” y cuando “viene el médico, lo ve pero no le da medicamentos, lo mira y se va”.