El ministro de Seguridad provincial, León Arslanian, declaró prescindibles a 116 integrantes de la Bonaerense, entre ellos seis que intervinieron en el caso Iannone y que fueron acusados por Blumberg de haber metido la mano en la lata –haber retenido 47 mil pesos del rescate–. Los dos máximos jefes de la DDI de San Martín, el comisionado Oscar Giles y el capitán Gustavo Espósito, figuran a la cabeza de los seis desplazados por la resolución ministerial. Otros diez uniformados de la Dirección de Sustracción de Automotores fueron despedidos por intentar robar, incluso con sopletes y soldadura autógena, la caja fuerte del Banco Provincia ubicada en un supermercado mayorista de La Plata.

Los efectivos no fueron exonerados, lo que significa que directamente hubieran quedado fuera de la fuerza, sino que se los declaró prescindibles, que es el paso anterior a la exoneración. En el caso Iannone, si el proceso judicial por el robo del rescate termina con una imputación a los seis efectivos, serán exonerados, además de que es muy posible que el juez Juan Manuel Culotta resuelva la detención de quienes considere fueron los principales protagonistas del robo.

Además de Giles y Espósito fueron declarados prescindibles otros cuatro efectivos que participaron de la investigación del caso Iannone: el teniente primero Sergio Reno, la teniente Silvina Fernanda Fe, el subteniente Juan Jasarevic y el sargento Claudio Suárez. Estos seis uniformados fueron incorporados en la lista después de que Blumberg denunciara que el tío de Hernán, Miguel Estete, le había confiado que policías de la DDI se habían quedado con 47 mil pesos y que recién los devolvieron cuando Iannone se dio cuenta y los reclamó. El hecho desató una controversia y cruce de acusaciones entre Blumberg y Luis Iannone, padre de Hernán. Blumberg sostenía que los Iannone mantienen negocios espurios con el intendente de José C. Paz, Mario Ishii, y el padre de Hernán acusaba al ingeniero de mentiroso y de poner en riesgo la vida de su hijo.

Además de los prescindibles del caso Ianonne, otros 38 fueron también separados de la fuerza por estar involucrados en distintos delitos. Entre ellos, los más destacados son los diez uniformados integrantes de la Dirección de Sustracción de Automotores de la Provincia. Los diez especialistas en desguace de autos fueron descubiertos con las herramientas apropiadas: sopletes y autógena, de cara a la caja fuerte del Banco Provincia ubicada en un importante supermercado platense.

Otros, también de Automotores –por donde pasó el inefable Osvaldo Seisdedos, echado de la Bonaerense el año pasado en vinculación con el famoso asalto al Banco Río de San Isidro–, fueron despedidos por efectuar procedimientos de su especialidad con el “único objeto de exigir dinero con el objeto de no judicializar las irregularidades detectadas”.

Otros 72 fueron despedidos porque se negaban a realizar cursos de perfeccionamiento. Aunque Felipe Solá había asegurado días atrás que no habría más purgas, ayer aprobó la nueva decisión. De hecho, Arslanian definió cada uno de los nombres con el propio Solá, en el despacho del gobernador.