Un ex miembro del Ku Klux Klan, sospechoso de haber participado en el asesinato de dos jóvenes negros de Mississippi, Estados Unidos, fue arrestado y acusado el miércoles, 42 años después de las muertes, anunció ayer el fiscal general estadounidense, Alberto Gonzales.

En mayo de 1964, James Seale, actualmente de 71 años, y otros miembros del Ku Klux Klan (KKK) secuestraron a Henry Dee y Charles Moore, los dos de 19 años, porque el primero militaba a favor de los derechos cívicos. Seale y otros miembros del KKK golpearon a los dos adolescentes hasta matarlos, para hacerles confesar un imaginario tráfico de armas, luego los ataron y arrojaron al río Mississippi.

Los dos cadáveres fueron hallados meses después, en el marco de las búsquedas iniciadas por la desaparición de tres jóvenes militantes contra el racismo, y encontrados asesinados poco después. Este caso más mediático –reflejado en la película Mississippi en llamas– eclipsó el doble asesinato y las autoridades locales abandonaron las investigaciones.

Gracias a la tenacidad del hermano de una de las víctimas, la investigación fue reabierta hace pocos años por el FBI.

Seale es acusado de secuestro y de asociación para delinquir, “los cargos que podemos probar”, explicó Gonzales, y precisó que corre el riesgo de ser condenado a cadena perpetua.