Fueron cuatro días de descanso y relax. Las minivacaciones cumplieron con su rol de desconexión. Y ayer las rutas se encargaron de la reconexión de los turistas al ritmo cotidiano. Las autovías y caminos que unen la Costa Atlántica, uno de los destinos preferidos en esta Semana Santa, con la Capital Federal y el Gran Buenos Aires tuvieron un intenso tránsito a lo largo del domingo, que se hizo patente con demoras en varios puntos del retorno por obras en construcción y manifestaciones. Fueron los mismos lugares donde se habían producido embotellamientos en el comienzo de este fin de semana largo.

La congestión más importante, según la Dirección Nacional de Vialidad (DNV), llegó a tener una extensión de 10 kilómetros y se dio durante la tarde en la Ruta 36, a la altura de Berazategui, donde desde hace semanas se realizan obras de construcción sobre la calzada. Como consecuencia, el tránsito debía circular por la colectora casi a paso de hombre.

Además, los vecinos de Brandsen volvieron a realizar actividades en el costado de la Ruta 2, a la altura del kilómetro 47, aunque esta vez fueron menos masivas que las del jueves pasado. Se limitaron a entregar a los automovilistas que pasaban volantes con su reclamo para que no se instale en su ciudad una planta del Ceamse. A eso se sumó la presencia de manifestantes sobre los bordes de la calzada en la zona de Lezama, partido de Chascomús, lo que obligó a los conductores a reducir la velocidad y generó nuevos retrasos.

Muchos conductores optaron por salir de la costa a primera hora, con la idea de esquivar el tránsito más intenso. Pero justamente como fueron varios los que tuvieron la ocurrencia, la circulación en esa franja horaria –usualmente tranquila– fue densa, sobre todo en las autopistas 25 de Mayo, Perito Moreno y Dellepiane. Desde Vialidad señalaron que unos once mil vehículos ingresaron a la Capital Federal entre las 10 y las 14, al tiempo que más de 400 viajaron hacia Mar del Plata.

Por otra parte, con el final de la Semana Santa llegó la hora de los balances. La Secretaría de Turismo (Sectur) detalló que los gastos de los turistas en este fin de semana largo produjeron un movimiento global de más de mil millones de pesos.

En Mar del Plata, operadores turísticos estimaron que casi 230 mil personas arribaron a Mar del Plata en estas minivacaciones, un 5 por ciento más que los que llegaron para esta fecha en 2006. En la Costa Atlántica en general, fue ocupada el 70 por ciento de la capacidad hotelera.

No se quedaron atrás varios de los otros destinos más difundidos del país. En Córdoba, los operadores señalaron que tanto en la capital cordobesa como en los principales centros serranos la ocupación de las plazas hoteleras llegó al 90 por ciento, y las autoridades turísticas vaticinaron que el movimiento de este año superará al de la Semana Santa de 2006, que fue de 590 mil personas. A las Cataratas del Iguazú llegaron más de 38 mil visitantes locales y extranjeros, mientras que en Salta, tanto la capital como los valles de Lerma y Calchaquí tuvieron en estos días su capacidad hotelera colmada, según funcionarios provinciales.