Un perro dogo mató ayer a una mujer de 86 años en la localidad de Longchamps, en la provincia de Buenos Aires, luego de liberarse de sus ataduras y mientras su dueño no estaba en su casa. El hecho ocurrió pasadas las 16, cuando la mujer, que vivía al lado del dueño del perro, había salido a la vereda. Allí, el perro la atacó en forma sorpresiva y la mordió reiteradamente antes de que pudieran intervenir sus vecinos.

Tras la agresión, los vecinos y la policía lograron dominar al dogo y los médicos intentaron salvar a la víctima, aunque sin éxito, ya que falleció minutos después a causa de las graves heridas recibidas. El animal fue llevado esta noche por la policía a un centro antirrábico, por orden judicial, en el marco de una discusión entre los vecinos y el dueño del dogo, quien manifestó sentirse “compungido por la situación”, aunque aseguró que el animal “no es agresivo”.

A manera de justificativo, el propietario del perro aseguró que la anciana “todos los días paseaba a sus perros delante de mi casa” y sugirió que eso podría haber sido la causa del ataque.