La tecnología sumó una prueba que puede ser clave en una causa penal, por la violación de una joven de 19 años, que involucra a un sargento de la Policía Bonaerense que ayer fue relevado de sus funciones, aunque sigue en libertad. El acusado es el sargento René Romero, imputado por la familia de una chica que tiene un leve retraso madurativo y que se había escapado de su casa luego de discutir con su padre. El policía, que se desempeñaba en la comisaría cuarta de Benavídez, partido de Tigre, encontró a la joven deambulando sin rumbo y abusó de ella dentro del patrullero en el que realizaba una recorrida de rutina. Romero fue suspendido y se le abrió un legajo con intervención de la Auditoría General de Asuntos Internos, confirmó a Página/12 una fuente del Ministerio de Seguridad bonaerense. El vocero comentó que está probado que, en la madrugada del domingo, el móvil a cargo de Romero “estuvo 40 minutos detenido” en una zona descampada donde se habría cometido la violación. La detención del patrullero fue registrada por el sistema de rastreo satelital A.V.L. (ver aparte) instalado en todos los vehículos de la Policía Bonaerense.

En la tarde del sábado, la familia de la víctima había denunciado, en la comisaría de Garín, la desaparición de la chica. En el caso interviene el fiscal de Pilar Gonzalo Acosta, quien estaba “tomando declaraciones testimoniales y recolectando pruebas” antes de tomar una decisión. Fuentes del Ministerio de Seguridad confirmaron que la pericia médica determinó que la joven “presentaba un desgarro que indicaría que fue forzada a mantener una relación sexual”. El otro dato fundamental lo aportó el registro del sistema A.V.L.

El patrullero fue llevado a la sede de las fiscalías de Pilar, donde peritos de la Gendarmería realizaron la búsqueda de huellas digitales y elementos que puedan servir para probar el delito. La chica, que vive en Garín, se presentó acompañada por sus familiares en la Comisaría de la Mujer de General Pacheco, donde también fue asistida por la Asociación de Víctimas de Violaciones (Avivi).

La presidenta de esa entidad, María Elena Leuzzi, dijo que los peritos de Gendarmería “encontraron vello púbico dentro del patrullero”. Leuzzi sostuvo que la denuncia “es gravísima porque la chica contó que fue violada en el patrullero por el mismo policía que la encontró cuando estaba perdida”. Con visible conmoción, la titular de Avivi sostuvo que “el cuerpo médico de Martínez comprobó que la chica estaba desgarrada y que había sido su primera relación” sexual.

El padre de la chica había recorrido distintas zonas de Benavídez y localidades vecinas. Llevaba consigo una foto de su hija y se la mostró a los policías que estaban patrullando por esos lugares. La víctima, en declaraciones a Radio Uno, sostuvo que le pidió ayuda al chofer del patrullero, porque no quería regresar a su casa y sabía que la estarían buscando. “Con el tipo (se refiere al policía) entramos en confianza, me pidió los datos, me dio su número de teléfono, me dijo que tenía hijos y me dijo de subir al patrullero”, relató la chica.

Según los dichos de la joven, el policía pasó primero por la comisaría cuarta y a ella la dejó en una esquina, con la promesa de regresar para ayudarla. “Cuando volvió estaba solo (el otro policía que estaba en el móvil se quedó en la seccional), me llevó en el auto, me dejó manejar como 20 minutos y me dijo de llevarme a mi casa. Le dije que no, que por favor no, y entonces me empezó a decir ‘qué le daba a cambio’”. Fue entonces que el policía trabó las puertas del móvil y la violó. Luego la hizo bajar del auto y la amenazó: “No digas nada, nosotros no nos conocemos”.

El caso tiene un antecedente similar ocurrido el 28 de mayo pasado en General Rodríguez. Una chica de 17 años fue llevada en patrullero al hotel alojamiento “El y Tú”, donde fue violada por dos policías que fueron relevados del cargo, aunque siguen en libertad.