Los policías y el fiscal se camuflaron a bordo de un carro tirado por caballos, hasta comprobar que era el hombre buscado. Así cayó uno de los sospechosos del asesinato de Franco Campeggi, detenido ayer una vivienda precaria de la localidad de Mariano Acosta, en el partido de Merlo. Se trata de Fernando Aballay, alias “El Moro”, señalado por los testigos como uno de los ladrones que participaron del asalto al cibercafé de Moreno y el que ejecutó al nene de un balazo. Estaba oculto en la casa de un amigo del padre, quien al parecer no sabía del pedido de captura que recaía sobre su huésped. El fiscal de la causa, Horacio Chiminelli, aseguró que muy pronto se dará con Gastón Godoy, el otro involucrado en el crimen que se escapó el fin de semana del hospital donde estaba internado. Al respecto, la mamá de Franco expresó sus sospechas sobre la posible complicidad policial en la fuga: dijo que los asaltantes robaban con protección de la policía.

Las pistas que dieron con el paradero de Aballay, de 30 años, fueron suministradas por un hombre que el lunes pasado se presentó en la Fiscalía de Moreno. “Ese testigo dio un dato puntual que nos llevó a la zona donde se escondía el sospechoso, que estaba prófugo desde el mismo día del hecho”, dijo el fiscal. El dato los guió hasta una casa ubicada en Dinamarca 1250, de Mariano Acosta. En los dos últimos días, en el marco de un operativo de inteligencia, los policías se habrían camuflado en un carro tirado por un caballo a la espera del prófugo.

Cuando confirmaron que realmente se trataba del hombre que buscaban, la policía de Mercedes montó un operativo y detuvo al hombre, ayer al mediodía. “Lo esperamos, y cuando pasó, la policía dio la voz de alto. Se metió en la casa, lo seguimos y se entregó pacíficamente”, contó el fiscal, quien ingresó a la zona a bordo de un sulky. El sospechoso se refugió en la casa de una familia amiga de su padre. “Es tal la precariedad que en la que vive esta familia que desconocía por completo que era un hombre buscado”, explicó. “Por eso cuando llegamos el dueño de casa no dudó en prestar su colaboración para que se llevara adelante la detención.”

El hombre será indagado mañana bajo el cargo de homicidio y robo calificado. Según los testigos, fue quien ejecutó de un disparo en la nuca a Franco la tarde del domingo 23 de septiembre pasado. El chico, de 12 años, se encontraba en el cíber cuando dos asaltantes llegaron en una moto robada y exigieron la recaudación. Los asaltantes se enojaron al saber que sólo había 30 pesos en la caja.