El taxímetro tendrá una imagen menos amistosa a partir de hoy, ya que los precios que reflejará serán un 19 por ciento más caros que ayer. La bajada de bandera subirá de 2,60 a 3,10, mientras que la ficha pasará a costar 31 centavos, frente a los 26 que salía hasta ahora. El incremento fue autorizado ayer mediante un decreto del gobierno porteño, que reglamentó una medida que había sido acordada el 2 de agosto pasado. Para la Dirección de Transporte porteña, el aumento “permitirá mitigar los efectos de los incrementos sufridos (por los propietarios de vehículos), asegurando para los licenciatarios una rentabilidad razonable y para los usuarios el acceso a una prestación con estándares óptimos”. El secretario general del Sindicato de Conductores de Taxis, José Ibarra, señaló que “este incremento llega tarde” y aseveró: “Hubiéramos estado de acuerdo con el 19 por ciento si se hubiera implementado en marzo de 2006”. En el mismo sentido, Luis Fernández, de la Asociación de Taxistas, advirtió que el tema “no está cerrado, porque es evidente que hay un desfasaje”, por lo que su organización realiza una evaluación del “precio que tendría que regir, para presentarlo ante las nuevas autoridades porteñas”.