Mónica Gordo, Lidia Alegri y Cecilia Lavalle, tres amigas, viajaban el martes por la madrugada en una camioneta Kangoo sin saber que esa salida tendría como final un hecho policial cargado de tensiones y próximo a marcar un record delictivo: las tres fueron secuestradas al mismo tiempo y liberadas con un rescate todo x 2 pesos: una PC y 200 de los devaluados.
El secuestro se produjo en Villa Dominico, mientras la Kangoo con las tres amigas avanzaba por una calle paralela a un arroyo entubado, a la altura de la estación Dominico. Al menos tres delincuentes las interceptaron, las amenazaron de muerte y las trasladaron en la camioneta a las torres de Dock Sud. Allí, una parte de la banda se dedicó con éxito a custodiar a Alegri y Lavalle.
El rol de la otra parte fue un desastre. Envió a Gordo en busca del rescate. La joven reunió apenas 200 pesos y una computadora personal. Pero antes de regresar al lugar pasó por la policía. Allí le aconsejaron que siguiera con los pasos ordenados por los delincuentes. Una comisión siguió a Gordo desde una distancia prudencial.
La rehén libre regresó entonces a las torres, pagó el rescate y exigió la liberación de sus dos amigas rehenes, cuestión que los delincuentes cumplieron al pie de la letra. Una vez liberadas, Gordo, Alegri y Lavalle salieron del lugar de cautiverio, fueron divisadas por la policía y comenzó el operativo. Los secuestradores lograron zafar con la parte más magra del botín, los 200 pesos, pero dejaron abandonadas la computadora personal y la camioneta Kangoo.