Sáb 05.04.2008

SOCIEDAD • SUBNOTA  › OPINIóN

De eso no se habla

› Por Jose Machain y Perla Prigoshin *

A cien días de iniciada la gestión de la administración Macri hay indicios desfavorables acerca del tipo de educación que se impartirá en la ciudad de Buenos Aires.

Pareciera que el ministro Mariano Narodowski ha decidido no aplicar la Ley de Educación Sexual que fuera sancionada en 2006 luego de un arduo trabajo de consenso.

La ley establece con contundencia que el Ministerio de Educación debe garantizar, por una parte, la realización de Talleres de Formación y Reflexión para padres, madres, tutores y todo otro responsable legal, y por la otra, formar y actualizar a los y las docentes a fin de que tengan las herramientas necesarias para abordar la enseñanza de la educación sexual.

Pues bien, no se está haciendo ni lo uno ni lo otro y todo indica que este año en las aulas porteñas la educación sexual brillará por su ausencia.

Muestra de lo dicho es que el ministro Narodowski ha reducido a sólo cuatro los cursos sobre Educación Sexual a dictarse en el CePA, la escuela de capacitación docente dependiente del gobierno porteño. Eso implica la concreción de apenas el 1 por ciento de los 370 cursos programados para el verano y el primer semestre del 2008.

Si esto lo comparamos con las propuestas de capacitación y talleres que existieron para la comunidad educativa en el mismo lapso del 2007, se puede afirmar que la educación sexual dista mucho de ser una prioridad para esta administración.

Entendemos imperiosa la reconsideración de las decisiones asumidas por el Ministerio de Educación y enfatizamos la importancia de aprovechar la experiencia obtenida como resultado de los talleres realizados por distintas ONG en el marco del programa “Nuestros derechos, nuestras vidas”, dados de baja por la actual gestión del Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes y que transitoriamente cubrían las demandas existentes de docentes, estudiantes y padres.

Compartimos plenamente la inversión en infraestructura educativa, pero la jerarquización de la educación no puede quedar reducida sólo a eso. Igual o mayor importancia tiene la actualización de los contenidos de la enseñanza así como la formación de quienes transmiten esos contenidos. La educación sexual forma parte inescindible de esta cuestión y es indicadora del tipo de relaciones sociales que buscamos promover.

Sin embargo en la ciudad de Buenos Aires... ¡de eso no se habla!

* Miembros del Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de la ciudad de Buenos Aires.

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