Susana Yedro está indignada con Asuntos Internos de la Federal y con un subcomisario de la Comisaría 5ª. En esa seccional se desempeñaba Jorge Sosa, el agente involucrado en la muerte de Ricardo Antonio Leguizamón. “¿Sabe lo que hizo este subcomisario de la 5ª?” La madre de Leguizamón comenzó el relato con una pregunta y luego completó: “Lo llamé para decirle que en su comisaría tenía al presunto asesino de mi hijo. Y lo único que hizo fue trasladarlo a un destacamento ubicado en Riccheri y General Paz. O sea que sacó la mierda de acá y la puso acá”, graficó la mujer moviendo las manos sobre la mesa, en un imaginario enroque.
Mientras Página/12 entrevistaba a Yedro, en su casa de Wilde, la mujer recibió un llamado de un comisario inspector de apellido Bottallo, que dijo ser de Asuntos Internos. Cuando se pone nerviosa, a Susana Yedro la voz le sale del alma y adquiere un imprensionante matiz dramático. Con ese tono, sin bajarlo a pesar del llanto, le contó de nuevo al comisario Bottallo su opinión acerca del traslado de Sosa. Palabra por palabra.
Y volvió a enojarse cuando su interlocutor telefónico le dijo que Asuntos Internos no sabía nada sobre lo que le pasó a su hijo. “¿Hay más de una sección Asuntos Internos? Porque en mi casa estuvieron trabajando un mes entero, hablaron con los vecinos, filmaron, grabaron declaraciones, recorrieron las villas cercanas en helicóptero y después me vinieron con un cuento: que a mi hijo lo había matado un mocoso de una villa. ¿Qué mocoso si los únicos que tiraron fueron los policías?”
Para abonar el drama, la familia tiene hipotecada la casa y le robaron, al salir del banco, los 20 mil pesos del seguro de vida por el hijo asesinado. A pesar del infortunio, todavía esperan un gesto de grandeza, Yedro le pidió al cronista: “Destaque que un comisario de apellido Milessi me atendió bien y prometió que iba a investigar”.