Desde antes del 16 de enero, Horacio Conzi tenía asignado “un ángel guardián” que lo seguía a todos lados. Era su amigo Roberto “Roby” Halbinger. La función se la había encomendado Hugo Conzi, quien tenía miedo que Horacio “se mandara algún moco”, admitió hace tiempo a este diario una fuente del clan familiar. Halbinger es uno de los que asegura que Conzi estaba con él y que no cometió ningún crimen. Sin embargo, los fiscales tendrían forma de desacreditar esa afirmación.
La versión se caería a pedazos porque la policía, mediante el sistema VAIC, que sirve para rastrear el origen de una llamada, habría determinado que a la hora del crimen, tanto los hermanos Conzi como Halbinger hicieron llamados “desde la zona de Béccar y no en Martínez”, donde está Dallas. Por el mismo sistema VAIC se detectaron las llamadas que determinaron que Horacio estaba en Mar del Plata, donde fue detenido.