Los jueces de ejecución penal de todo el país se dieron cita en un encuentro en la ciudad de San Juan para debatir por la problemática cotidiana carcelaria, de ejecución de la pena, desde cuestiones tan amplias y profundas como la tortura, hasta el trabajo en la cárcel, el peculio, los efectos que produce la prisionalización, los indicadores psicológicos o la ejecución de la pena en los delitos de lesa humanidad. Todos temas que en la opinión pública tienen fuerte incidencia, aunque se los conozca bajo otras denominaciones.

Alrededor de 200 jueces de todo el país, pero también un nutrido grupo de psicólogas/os con trabajo en cárceles y asistentes sociales y unos pocos presos con permiso de salida (“lamento decir que otros años fue mayor el número de permisos”, dijo Sergio Delgado, presidente de la Asociación de Jueces de Ejecución Penal organizadora del encuentro junto a Margarita Camus, jueza de ejecución de San Juan), ocuparon las graderías del auditorio del Centro Cívico.

Los Mecanismos de Prevención de la Tortura abrieron el encuentro con Rodrigo Borda, por la Procuración Penitenciaria, y Roberto Cipriano García, de la Comisión Provincial por la Memoria, y el juez de ejecución penal Alfonso González López, de Palmira, Colombia. Siguieron las comisiones de trabajo en Políticas Sociales de Inserción, Sanciones Disciplinarias y Políticas Penitenciarias, cuyas conclusiones serán entregadas al finalizar el encuentro. Por la tarde, se desarrolló el panel sobre Tratamiento Penitenciario, integración de los equipos interdisciplinarios, que contó con María Carolina Tamagnini, psicóloga de la Justicia de Ejecución Penal, y Juan Carlos Domínguez Lostaló, representante de Ilanud en Argentina.