¿Quiénes pueden tramitar la rectificación registral del sexo y el cambio de nombre de pila en un nuevo DNI? ¿Qué pasos se deben dar? ¿Cómo es el procedimiento si se trata de personas trans menores de 18 años? ¿Quiénes pueden someterse a una operación de reasignación de sexo y cuánto sale? Estas son algunas de las preguntas que responde un cuadernillo que acaba de editar la Defensoría General de la Ciudad, para que la población trans conozca con detalles la Ley de Identidad de Género, pueda sacarse dudas, y ejercer sus derechos sin barreras. El manual fue presentado en un acto en el que participó la diputada del Frente para la Victoria Gabriela Alegre. “Sabemos que muchas veces no alcanza con legislar sobre nuevos derechos para que éstos sean una realidad efectiva para la ciudadanía, por eso la elaboración y difusión de este cuadernillo es una iniciativa muy importante, ya que brinda herramientas para facilitar el reclamo y hacer propio los derechos consagrados por la Ley de Identidad de Género, así como también colabora para que quienes tienen que garantizar su cumplimiento, sepan cómo hacerlo”, destacó Alegre en diálogo con Página/12.

El material fue realizado por la Secretaría General de Derechos Humanos de la Defensoría General de la Ciudad, el Inadi, la Coordinación de Diversidad Sexual del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación. Participaron especialmente en el proceso de relevamiento y la validación de los contenidos del cuadernillo, la Asociación Lucha por la Identidad Travesti y Transexual (Alitt), el Movimiento Antidiscriminatorio de Liberación (MAL), Futuro Transgénero y el Frente Nacional por la Ley de Identidad de Género (Fnlig). Las organizaciones se encargarán de distribuirlo entre la población interesada. Hay una versión en papel y otra digital.

El cuadernillo está organizado en torno de dos grandes tópicos. El primero agrupa información referida a la rectificación registral del sexo y el cambio de DNI. El segundo, reúne datos relevantes vinculados con la salud, sobre la adecuación corporal a la identidad de género autopercibida. En un apartado especial, figuran las pautas para la obtención de estos derechos por parte de personas extranjeras. “Es importante que sepas que para solicitar la rectificación registral del sexo y cambio de nombre/s de pila, no es necesario que pruebes que has recibido algún tipo de intervención quirúrgica genital, total o parcial, ni tampoco probar que te están realizando terapias hormonales o tratamientos psicológicos o médicos”, dice el cuadernillo, al comienzo. Lleva por nombre “En la letra de la ley y en las calles de la Ciudad”.

“La Ley de Identidad de Género considera que hay otra manera de estar en el mundo, diferente de la propia del varón y de la mujer; reconoce, en otras palabras, el derecho de las personas trans a vivir libres de violencia y discriminación y apela a los Estados provinciales y al de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a adoptar medidas que aseguren el cumplimiento de la norma de cara a la construcción de una sociedad más democrática”, señala el texto. Pero advierte que las leyes son condiciones necesarias pero no suficientes para lograr el ejercicio de un derecho. La apropiación de éste es un “proceso complejo y largo” en el que intervienen diferentes actores, aclara. “El corto trayecto transitado por la Ley de Identidad de Género revela algunas deficiencias en su implementación, sostenidas ellas, en su mayor parte, por el desconocimiento aún existente”, dice el cuadernillo. Las preguntas que responde fueron formuladas sobre la base de información recogida a través de un instructivo especialmente preparado para relevar las principales dudas, dificultades y problemas que han encontrado los/as destinatarios/as para el acceso al derecho a la identidad de género autopercibida, se señala en la introducción.