Un curioso fallo del Supremo Tribunal de Justicia del Chaco rechaza el hábeas corpus presentado por un detenido, quien había sido alojado en el baño de la comisaría 3ª de Barranqueras por falta de espacio en las celdas, y reclamaba por el deterioro en las condiciones de detención. La Corte chaqueña rechazó el pedido al sostener que no lo consideraba como tortura (la defensora reclamaba también por el cambio imprevisto y no informado a los familiares) y que el baño, pese a que había que reconocer “que no puede ser considerado como un espacio físico adecuado”, había sido modificado como celda. No se mencionó la posibilidad de considerarla como una celda con baño en suite.

El 8 de abril pasado, la Cámara Segunda en lo Criminal de Resistencia rechazó el hábeas corpus correctivo presentado por la hermana y la madre de un detenido que había sido trasladado de una comisaría a otra. El reclamo de la defensora oficial 11 sostuvo que el detenido había sido trasladado argumentando mejorar sus condiciones de detención, pero que fue alojado en un baño readaptado como celda, sin avisar a sus familiares, y que producía agravamiento en las condiciones de detención.

La defensora apeló ante el STJ y sostuvo que si el traslado había sido a un “baño-celda”, las condiciones anteriores debían ser prácticamente inclasificables, y que había sido trasladado sin informar a la familia. El STJ rechazó el pedido sosteniendo que si bien no eran las condiciones adecuadas, el baño había sido modificado como celda.

El STJ analizó la presentación del hábeas corpus desde el punto de vista absolutamente abstracto de la letra de la ley, sosteniendo que el término “tortura” que la defensora consideró a la que era sometido el detenido, no correspondía como término porque el alojamiento en el baño y sin avisar a la familia no constituía un caso de tortura.

El tipo tenía baño en suite y se quejaba.